UN RATITO CON SAN JOSÉ
José, varón justo
Un comunista llamado Lenin le dice a otro:"Camarada, compremos una vaca y apliquemos en ella el comunismo, te encargo que la alimentes, luego hablamos". Pasaron unos meses y solo Lenin se aprovechaba de la leche. Ante ello, el otro reclamó. Pero Lenin le dijo: "camarada, de qué te quejas, te dije que íbamos a aplicar el comunismo con la vaquita. Hemos partido la vaca en dos, a ti te tocade la boca a la mitad del estomago. Por tanto, tú debes de darle de comer. Y a mí me toca de la mitada del estómago de la vaca hasta la cola, por tanto, yo recojo la leche".
El comunismo no trajo justicia, solo ocasión violencia y odio de clases. Pero tampoco el capitalismo es la solución pues no se personas con deberes y derechos sino solo medios para obtener abundante dinero. El refrán del capitalismo liberal es: "con la plata baila el mono". En cambio la verdadera justicia viene de Dios.
El justo
Cuando nosotros leemos la Biblia podemos percibir que el calificativo "justo" se aplica a quien tiene una relación correcta con Dios. Así, por ejemplo, son considerados justos varios personajes del Antiguo Testamento como Noé, Abraham, Job, entre otros.
Al justo se le aplican estas palabras del Salmo 1: "!Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los malvados, ni en la senda de los pecadores se detiene, ni en el banco de los burlones se sienta, mas se complace en la ley de Yahveh, su ley susurra día y noche!" (Sal 1,1-2).
Y en el Nuevo Testamento, destaca la figura de San José como el "varón justo" (Mt 1,19). Con esta denominación, ya tenemos una idea sobre la vida de San José. En efecto, este santo varón llevó una vida honesta pues su relación con Dios era correcta y, por eso, es llamado justo.
P. Carlos Rosell De Almeida