Nuestras madres
“Me preguntas qué es la Madre. Junta el perfume de todas las flores y el arrullo de todas las montañas y la inquietud de todos los ríos; la frescura de todos los valles y la mirada de todas las estrellas; la caricia de todas las brisas y el beso de todos los labios. Todo guardado por Dios en un corazón de mujer. Eso es una madre” (A. Barbieri).
Iba un borracho caminando a su casa, cuando se detuvo ante un letrero que le llamó la atención. Y comenzó a llorar desconsoladamente. Pasó por casualidad su vecino que, al verlo tan afligido, le preguntó: —¿Por qué llora, vecino? El borracho le contestó:
— A lo que hemos llegado en este mundo. Mira lo que dice ese letrero: “Se vende madre sin sentimiento”. El vecino lee el letrero y le contesta: — Pero, chico, tú no ves que allí dice: “Se vende madera, zinc y cemento”.
La primera mujer, Eva, salió de la costilla del hombre... No de los pies, para ser pisoteada. No de la cabeza, para ser superior... Sino del lado, para ser igual. Debajo del brazo, para ser protegida y al lado del corazón, para ser amada. Que este símbolo ayude a los esposos a cultivar cada día una mejor convivencia, hecha de respeto y tolerancia mutua.
* Enviado por el P. Natalio
No hay comentarios:
Publicar un comentario