lunes, 4 de diciembre de 2017

LOS CINCO MINUTOS DE MARÍA, 4 DICIEMBRE


Los cinco minutos de María 
Diciembre 4




Nada malo agrada a Dios ni a la Santísima Virgen: los devotos de María siempre tuvieron como meta agradar en todo a la celestial Señora y, por su intermedio, a Nuestro Señor.

La devoción a la Virgen ha sido siempre un verdadero y poderoso estímulo para la purificación de la propia vida y para el progreso en el camino de la perfección. No la abandonemos nunca, de modo que podamos llegar a la santidad a la que estamos llamados.
María, que te consagraste sin titubeos a tu vocación, con todos sus riesgos, anima la realización de nuestra auténtica vocación.



* P. Alfonso Milagro

EL EVANGELIO DE HOY LUNES 4 DICIEMBRE 2017


Lecturas de hoy Lunes de la 1ª semana de Adviento
Hoy, lunes, 4 de diciembre de 2017



Primera lectura
Lectura del libro de Isaías (2,1-5):

VISIÓN de Isaías, hijo de Amós, acerca de Judá y de Jerusalén.
En los días futuros estará firme
el monte de la casa del Señor,
en la cumbre de las montañas,
más elevado que las colinas.
Hacia él confluirán todas las naciones,
caminarán pueblos numerosos y dirán:
«Venid, subamos al monte del Señor,
a la casa del Dios de Jacob.
Él nos instruirá en sus caminos
y marcharemos por sus sendas;
porque de Sión saldrá la ley,
la palabra del Señor de Jerusalén».
Juzgará entre las naciones,
será árbitro de pueblos numerosos.
De las espadas forjarán arados,
de las lanzas, podaderas.
No alzará la espada pueblo contra pueblo,
no se adiestrarán para la guerra.
Casa de Jacob, venid;
caminemos a la luz del Señor.

Palabra de Dios



PRIMERA LECTURA (opcional para el año A) Is 4, 2-6

Lectura del libro de Isaías.

AQUEL día, el vástago del Señor será el esplendor y la gloria, y el fruto del país será orgullo y ornamento para los redimidos de Israel.
A los que queden en Sion y al resto de Jerusalén
los llamarán santos: todos los que en Jerusalén están inscritos para la vida.
Cuando el Señor haya lavado la impureza de las hijas de Sion
y purificado la sangre derramada en Jerusalén,
con viento justiciero, con un soplo ardiente,
creará el Señor sobre toda la extensión del monte Sion y sobre su asamblea una nube de día, un humo y un resplandor de fuego llameante de noche.
Y por encimo, la glora será un baldaquino
y una tienda, sombra en la canícula,
refugio y abrigo de la tempestad y de la lluvia.

Palabra de Dios.


Salmo
Sal 121,1-2.4-5.6-7.8-9

R/. Vamos alegres a la casa del Señor.

V/. ¡Qué alegría cuando me dijeron:
«Vamos a la casa del Señor»!
Ya están pisando nuestros pies
tus umbrales, Jerusalén. R/.

V/. Jerusalén está fundada
como ciudad bien compacta.
Allá suben las tribus,
las tribus del Señor. R/.

V/. Según la costumbre de Israel,
a celebrar el nombre del Señor;
en ella están los tribunales de justicia,
en el palacio de David. R/.

V/. Desead la paz a Jerusalén:
«Vivan seguros los que te aman,
haya paz dentro de tus muros,
seguridad en tus palacios». R/.

V/. Por mis hermanos y compañeros,
voy a decir: «La paz contigo».
Por la casa del Señor, nuestro Dios,
te deseo todo bien. R/.



Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Mateo (8,5-11):


EN aquel tiempo, al entrar Jesús en Cafarnaún, un centurión se le acercó rogándole:
«Señor, tengo en casa un criado que está en cama paralítico y sufre mucho».
Le contestó:
«Voy yo a curarlo».
Pero el centurión le replicó:
«Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo. Basta que lo digas de palabra, y mi criado quedará sano. Porque yo también vivo bajo disciplina y tengo soldados a mis órdenes; y le digo a uno: "Ve", y va; al otro: "Ven", y viene; a mi criado: "Haz esto", y lo hace».
Al oírlo, Jesús quedó admirado y dijo a los que le seguían:
«En verdad os digo que en Israel no he encontrado en nadie tanta fe. Os digo que vendrán muchos de oriente y occidente y se sentarán con Abrahán, Isaac y Jacob en el reino de los cielos».

Palabra del Señor



Comentario al Evangelio de hoy lunes, 4 de diciembre de 2017
Ciudad Redonda



Queridos amigos y amigas:

¡Feliz Adviento recién estrenado! Os deseo un tiempo de descubrimiento de Dios -Él siempre es novedad-, un tiempo de gracia, un tiempo de cordura, un tiempo de confianza. Un tiempo –¡Cómo no!- de Esperanza. Un auténtico Tiempo Fuerte.

El profeta Isaías ya se deja escuchar. Una voz henchida de esperanza. Un grito de «hay futuro», cuando nos damos cuenta de que Dios actúa. Un caudal de vida que desahoga y nos arrastra hasta el monte de la casa del Señor.

¿Cuántas veces hemos soñado -y cantado- arados nuevos de espadas viejas y lanzas desechadas para construir podaderas? ¿Cuántas veces hemos orado para que no levante la espada pueblo contra pueblo, ni hermano contra hermano?  Pues seguiremos soñando y cantando y rezando, porque nos queda todavía mucha esperanza por recorrer. Una bendita esperanza, que nos sacude para seguir aprendiendo los caminos del Señor. Una bendita esperanza, que nos saca de cualquier postración y nos yergue al encuentro del Salvador.

Y es que hemos de mirar bien, a ver si tenemos, en algún rincón del alma, un «criado», o más de uno, que necesita sanar. Una parálisis que nos hace sufrir, pero que -en un tiempo fuerte como éste- nos motiva para salir al encuentro del Único capaz de sanar. Si es así, necesitamos la fe del centurión del Evangelio de Mateo. Una fe que es esperanza. Una fuerza que abre nuestras vidas al camino de la salvación.

Si Él nos encuentra con esa bendita esperanza, confiando que una sola palabra suya puede sanarnos, nos invitará a entrar en el banquete del Reino y nosotros nos sentiremos seguros, vestidos para la ocasión. Entremos, pues, a la Fiesta… ¿O todavía no?

FELIZ SEMANA!!!!




domingo, 3 de diciembre de 2017

COMO LOS NIÑOS


Como los niños




¿Cómo es un niñito? Sencillo, sincero, confiado, humilde, puro, inocente… Pienso que Jesús cuando dijo, “Si no se hacen como un niño, no entrarán en el reino de los cielos”, tenía presente en su mente a una criatura descansando en los brazos de su madre. Así nos quiere el Señor por la confianza y abandono en él. La oración siguiente expresa muy bien estos sentimientos.

Como el niño que no sabe dormirse
sin asirse a la mano de su madre,
así mi corazón viene a ponerse
sobre tus manos al caer la tarde.

Como el niño que sabe que alguien vela
su sueño de inocencia y esperanza,
así descansará mi alma segura,
sabiendo que eres tú, Señor, quien nos aguarda.

Este breve himno es apropiado para recitar al fin del día. La imagen del niño y la madre nos lleva dulcemente a recuerdos de simplicidad e inocencia, afloja nuestras tensiones por la lucha diaria y predispone alma y cuerpo para el descanso de la noche. Que el Señor te bendiga con su paz.



* Enviado por el P. Natalio

ALABANZAS A LA VIRGEN DE ADVIENTO

Alabanzas a la Virgen de Adviento



¡Oh Santísima Virgen María! sea una y mil veces bendito vuestro purismo seno, en que por nueve meses hizo su morada el Hijo de Dios, hecho hombre por dar salud a mi alma. Avemaría.

¡Oh Santísima Virgen María! sea una y mil veces bendito vuestro maternal regazo en que reposó y durmió dulcemente el Hijo de Dios, hecho hombre por dar salud a mi alma. Avemaría.

¡Oh Santísima Virgen María! sean una y mil veces benditos vuestros santísimos brazos, que llevaron, abrazaron y tiernamente estrecharon al Hijo de Dios, hecho hombre por dar salud a mi alma. Avemaría.

¡Oh Santísima Virgen María! sean una y mil veces benditas vuestras hermosísimas manos, que acariciaron y cuidadosamente sirvieron al Hijo de Dios, hecho hombre por dar salud a mi alma. Avemaría.

¡Oh Santísima Virgen María! sean una y mil veces benditos vuestros ojos virginales que con tanto deleite se recrearon contemplando el rostro del Hijo de Dios, hecho hombre por dar salud a mi alma. Avemaría.

¡Oh Santísima Virgen María! sean una y mil veces benditos vuestros oídos castísimos, que con tanta frecuencia oyeron el dulce nombre de Madre de la boca del Hijo de Dios, hecho hombre por dar salud a mi alma. Avemaría.

¡Oh Santísima Virgen María! sean una y mil veces benditos vuestros candidísimos labios, que con gozo inexplicable imprimieron tiernos besos en el Hijo de Dios, hecho hombre por dar salud a mi alma. Avemaría.

¡Oh Santísima Virgen María! sea una y mil veces bendita vuestra lengua angelical, que sin cesar alabó y llamó hijo querido al Hijo de Dios, hecho hombre por dar salud a mi alma. Avemaría.

LOS CINCO MINUTOS DE MARÍA, 3 DICIEMBRE


Los cinco minutos de María
Diciembre 3





Reina de los Apóstoles, Reina de los misioneros, Estrella de la evangelización: así llama la Iglesia a la Virgen, nuestra Señora.
En ella encontraron los apóstoles la luz, el consejo y la fuerza para lanzarse a la ardua empresa de la cristianización del mundo pagano. En ella encontraron consuelo y apoyo los misioneros de Cristo que, a través de los siglos, continuarían la misión de la Iglesia evangelizando los cinco continentes.

María, sé tú la estrella de nuestra espiritualidad misionera en un mundo necesitado de Dios.



* P. Alfonso Milagro

PAPA FRANCISCO: EL ADVIENTO NOS INVITA A ESTAR VIGILANTES Y VENCER EL DESÁNIMO


Papa Francisco: El Adviento nos invita a estar vigilantes y vencer el desánimo
 Foto: ACI Prensa





VATICANO, 03 Dic. 17 / 06:16 am (ACI).- Pocas horas después de regresar de su viaje en Myanmar y Bangladesh, el Papa Francisco se asomó a la ventana del Palacio Apostólico del Vaticano para presidir el rezo del Ángelus, durante el que pidió prepararse para la Navidad y estar vigilantes para acoger a Dios.

En el primer domingo de Adviento, el Pontífice explicó que “es el tiempo que nos es dado para acoger al Señor que viene a nuestro encuentro, para verificar nuestro deseo de Dios, para mirar hacia delante y prepararnos al retorno de Cristo”.

“Él volverá a nosotros en la fiesta de la Navidad, cuando haremos memoria de su venida histórica en la humildad de la condición humana” pero que “viene a nosotros cada vez que estamos dispuestos a recibirlo”.

Francisco comentó que las lecturas de la liturgia del día invitan a estar vigilantes y en espera. “La persona que pone atención es la que, a pesar del rumor del mundo, no deja de abrumarse por las distracciones o la superficialidad, sino que vive de manera plena y consciente, con una preocupación dirigida ante todo a los demás”.

“La persona atenta se dirige también al mundo, buscando contrastar la indiferencia y la crueldad presentes en ella, y alegrándose por los tesoros de belleza que también existen y deben ser cuidados”.

El Papa también subrayó que la persona vigilante es la que no “se deja vencer por el sueño del desánimo, de la falta de esperanza, de la desilusión” y al mismo tiempo “rechaza la solicitud de tantas vanidades de las que desborda el mundo y detrás de las cuales, a veces, se sacrifican tiempo y serenidad personal y familiar”.

Por último, invitó a no “vagar perdidos en nuestros pecados e infidelidades” y a no buscar "la felicidades en otras partes", sino a recorrer la “buena vía, la de la fe y el amor”.

EL EVANGELIO DE HOY DOMINGO 3 DICIEMBRE 2017 - PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO


1 Domingo de Adviento – Ciclo B
Domingo 3 de diciembre de 2017

“Estad en vela“





Primera lectura

Lectura del libro de Isaías (63,16b-17.19b;64,2b-7):

Tú, Señor, eres nuestro padre, tu nombre de siempre es «Nuestro redentor». Señor, ¿por qué nos extravías de tus caminos y endureces nuestro corazón para que no te tema? Vuélvete, por amor a tus siervos y a las tribus de tu heredad. ¡Ojalá rasgases el cielo y bajases, derritiendo los montes con tu presencia! Bajaste y los montes se derritieron con tu presencia, jamás oído oyó ni ojo vio un Dios, fuera de ti, que hiciera tanto por el que espera en él. Sales al encuentro del que practica la justicia y se acuerda de tus caminos. Estabas airado, y nosotros fracasamos; aparta nuestras culpas, y seremos salvos. Todos éramos impuros, nuestra justicia era un paño manchado; todos nos marchitábamos como follaje, nuestras culpas nos arrebataban como el viento. Nadie invocaba tu nombre ni se esforzaba por aferrarse a ti; pues nos ocultabas tu rostro y nos entregabas en poder de nuestra culpa. Y, sin embargo, Señor, tú eres nuestro padre, nosotros la arcilla y tú el alfarero: somos todos obra de tu mano.

Palabra de Dios

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Salmo

Salmo 79,2ac.3b.15-16.18-19

R/. Oh Dios, restáuranos, que brille tu rostro y nos salve

Pastor de Israel, escucha,
tú que te sientas sobre querubines, resplandece.
Despierta tu poder y ven a salvarnos. R/.

Dios de los ejércitos, vuélvete:
mira desde el cielo, fíjate, ven a visitar tu viña,
la cepa que tu diestra plantó,
y que tú hiciste vigorosa. R/.

Que tu mano proteja a tu escogido,
al hombre que tú fortaleciste.
No nos alejaremos de ti;
danos vida, para que invoquemos tu nombre. R/.

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Segunda lectura

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (1,3-9):

La gracia y la paz de parte de Dios, nuestro Padre, y del Señor Jesucristo sean con vosotros. En mi acción de gracias a Dios os tengo siempre presentes, por la gracia que Dios os ha dado en Cristo Jesús. Pues por él habéis sido enriquecidos en todo: en el hablar y en el saber; porque en vosotros se ha probado el testimonio de Cristo. De hecho, no carecéis de ningún don, vosotros que aguardáis la manifestación de nuestro Señor Jesucristo. Él os mantendrá firmes hasta el final, para que no tengan de qué acusaros en el día de Jesucristo, Señor nuestro. Dios os llamó a participar en la vida de su Hijo, Jesucristo, Señor nuestro. ¡Y él es fiel!

Palabra de Dios

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Lectura del santo evangelio según san Marcos (13, 33-37):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Mirad, vigilad: pues no sabéis cuándo es el momento. Es igual que un hombre que se fue de viaje y dejó su casa, y dio a cada uno de sus criados su tarea, encargando al portero que velara. Velad entonces, pues no sabéis cuándo vendrá el dueño de la casa, si al atardecer, o a medianoche, o al canto del gallo, o al amanecer; no sea que venga inesperadamente y os encuentre dormidos. Lo que os digo a vosotros lo digo a todos: ¡Velad!»

Palabra del Señor

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Evangelio Comentado por:
José Antonio Pagola
Mc 13, 33-37

UNA IGLESIA DESPIERTA

Jesús está en Jerusalén, sentado en el monte de los Olivos, mirando hacia el Templo y conversando confidencialmente con cuatro discípulos: Pedro, Santiago, Juan y Andrés. Los ve preocupados por saber cuándo llegará el final de los tiempos. A él, por el contrario, le preocupa cómo vivirán sus seguidores cuando ya no lo tengan entre ellos.

Por eso, una vez más, les descubre su inquietud: «Mirad, vivid despiertos». Después, dejando de lado el lenguaje terrorífico de los visionarios apocalípticos, les cuenta una pequeña parábola que ha pasado casi inadvertida entre los cristianos.

«Un señor se fue de viaje y dejó su casa». Pero, antes de ausentarse, «confió a cada uno de sus criados su tarea». Al despedirse solo les insistió en una cosa: «Vigilad, pues no sabéis cuándo vendrá el dueño de la casa». Que, cuando venga, no os encuentre dormidos.

El relato sugiere que los seguidores de Jesús formarán una familia. La Iglesia será «la casa de Jesús» que sustituirá a «la casa de Israel». En ella, todos son servidores. No hay señores. Todos vivirán esperando al único Señor de la casa: Jesús, el Cristo. No lo han de olvidar jamás.

En la casa de Jesús nadie ha de permanecer pasivo. Nadie se ha de sentir excluido, sin responsabilidad alguna. Todos somos necesarios. Todos tenemos alguna misión confiada por él. Todos estamos llamados a contribuir a la gran tarea de vivir como Jesús. Él vivió siempre dedicado a servir al reino de Dios.

Los años irán pasando. ¿Se mantendrá vivo el espíritu de Jesús entre los suyos? ¿Seguirán recordando su estilo servicial a los más necesitados y desvalidos? ¿Le seguirán por el camino abierto por él? Su gran preocupación es que su Iglesia se duerma. Por eso les insiste hasta tres veces: «Vivid despiertos». No es una recomendación a los cuatro discípulos que le están escuchando, sino un mandato a los creyentes de todos los tiempos: «Lo que os digo a vosotros os lo digo a todos: velad».

El rasgo más generalizado de los cristianos que no han abandonado la Iglesia es seguramente la pasividad. Durante siglos hemos educado a los fieles para la sumisión y la obediencia. En la casa de Jesús, solo una minoría se siente hoy con alguna responsabilidad eclesial.

Ha llegado el momento de reaccionar. No podemos seguir aumentando aún más la distancia entre «los que mandan» y «los que obedecen». Es pecado promover el desafecto, la mutua exclusión o la pasividad. Jesús nos quería ver a todos despiertos, activos, colaborando con lucidez y responsabilidad en su proyecto del reino de Dios.

FELIZ DOMINGO!!





sábado, 2 de diciembre de 2017

SIETE PREGUNTAS MÁS COMUNES SOBRE EL ADVIENTO


Respuestas a las 7 preguntas más comunes sobre el Adviento




Muchos fieles cuentan con una comprensión intuitiva y basada en la experiencia del Adviento, pero ¿qué dicen los documentos de la Iglesia sobre este tiempo de preparación para la Navidad?

Estas son algunas de las preguntas y respuestas más comunes acerca del Adviento, que este año comienza el domingo 3 de diciembre.

1. ¿Cuál es el propósito del Adviento?

El Adviento es un tiempo en el calendario litúrgico de la Iglesia, específicamente, del calendario de la Iglesia Latina, que es la más grande en comunión con el Papa. Otras iglesias católicas –así como muchas no católicas– tienen su propia celebración del Adviento.

Según las Normas Generales para el Año Litúrgico y el calendario, esta fiesta tiene un carácter doble: en primer lugar es una temporada para prepararnos para la Navidad, cuando se recuerda la primera venida de Cristo; y en segundo lugar, una estación que apela directamente a la mente y el corazón para esperar la segunda venida de Cristo al final de los tiempos.

El Adviento es, entonces, un período de espera devota y alegre (Norma 39) que trae a la mente las dos venidas de Cristo.

2. ¿Cuándo comienza y termina el Adviento?

El primer domingo de Adviento es el primer día del Nuevo Año Litúrgico, que este año será el 3 de diciembre. Los tres domingos de Adviento restantes serán el 10, 17 y 24 de diciembre. La duración de este tiempo de preparación puede variar de 21 a 28 días, dado que se celebran los cuatro domingos más próximos a la festividad de Navidad.

3.- ¿Por qué no se canta ni se recita el gloria?

En Adviento, no se recita el gloria porque es una de las maneras de expresar concretamente que, mientras dura nuestro peregrinar, falta algo para que el gozo sea completo.

Cuando el Señor se haga presente en medio de su pueblo, habrá llegado la Iglesia a su fiesta completa, significada por Solemnidad de la fiesta de la Navidad, cuando se cante nuevamente el gloria.

El Misal Romano señala que el gloria se recita o se canta los domingos fuera de los tiempos de Adviento y Cuaresma.

Las excepciones a esta regla durante el Adviento son la Solemnidad de la Inmaculada Concepción, el 8 de diciembre; y la fiesta de la Virgen de Guadalupe el 12 de diciembre.

4. ¿Cuál es el color que distingue a este tiempo?

El color normal del Adviento es el morado. El numeral 346 de la Instrucción General del Misal Romano (IGMR) dispone que “el color morado se usa en los Tiempos de Adviento y de Cuaresma. Puede usarse también en los Oficios y Misas de difuntos”.

En muchos lugares, hay una notable excepción para el tercer domingo de Adviento, conocido como el domingo de Gaudete: “El color rosado puede usarse, donde se acostumbre, en los domingos Gaudete (III de Adviento) y Laetare (IV de Cuaresma)” (IGMR, 346).

5. ¿Es el Adviento un tiempo penitencial?

A menudo pensamos en el Adviento como una temporada penitencial porque el color litúrgico es el morado, como en la Cuaresma. Sin embargo, según el canon 1250 del Código de Derecho Canónico: “los días y tiempos penitenciales en la Iglesia universal son todos los viernes de todo el año y la temporada de Cuaresma”.

Aunque las autoridades locales pueden establecer días penitenciales adicionales, este es un listado completo de los días y tiempos penitenciales de la Iglesia Latina en su conjunto, y el Adviento no es uno de ellos.

6. ¿Cómo se decoran las iglesias?

El numeral 305 de la Instrucción General del Misal Romano señala que “durante el tiempo de Adviento el altar puede adornarse con flores, con tal moderación, que convenga a la índole de este tiempo, pero sin que se anticipe a la alegría plena del Nacimiento del Señor”.

“Los arreglos florales sean siempre moderados, y colóquense más bien cerca de él, que sobre la mesa del altar”.

7. ¿Qué expresiones de piedad popular podemos usar en este tiempo?

Hay una variedad de expresiones de piedad popular que la Iglesia ha reconocido para su uso durante el Adviento. Entre ellas se encuentra la Corona de Adviento, procesiones, solemnidad de la Inmaculada Concepción el 8 de diciembre, novena de Navidad, el Nacimiento, etc.

Se puede leer acerca de estas devociones en el Directorio sobre la Piedad Popular y la Liturgia (comenzando en el N°96),

Bonus: ¿Cómo debe ser la música?

El numeral 305 de la Instrucción General del Misal Romano señala que “en Adviento el uso del órgano y de otros instrumentos musicales debe ser marcado por una moderación adecuada al carácter de esta época del año, sin expresar con anticipación la alegría plena de la Natividad del Señor”.


Por: Jimmy Akin | Fuente: NCRegister.com // ACIprensa.com 

QUÉ HARÍA CRISTO EN MI LUGAR?

¿QUÉ HARÍA CRISTO EN MI LUGAR?


Me ha costado. Pero, poco a poco, me voy llenando de una confianza esplendida en Dios y su voluntad.


Por: Claudio de Castro | 




Me ha costado. Pero, poco a poco, me voy llenando de una confianza esplendida en Dios y su voluntad. Y es que no es fácil vivir el Evangelio: amar al que no te ama, perdonar al que te hace daño, confiar en las promesas de Dios, aprender a vivir en sus manos amorosas.

La verdad es que con mis fuerzas, jamás podría. Por eso creo que “todo” es gracia de Dios...

Jesús, sabiendo cómo somos, nos dejó este consejo maravilloso, para fortalecer nuestras vidas:

“Velad y orad, para que no caigáis en tentación; que el espíritu está pronto, pero la carne es débil.» (Mc 14,38)

Pienso mucho en cuánto me falta la oración.

Hace poco una persona amable, en apariencia, se me acercó para conversar. Al final, cuando me despedía, y estaba desprevenido, lanzó una palabra hiriente, sonriendo de satisfacción. Fue un momento extraño. Perdoné sin comprender. Y es que para perdonar, basta amar.

La gracia de Dios te ayuda a no perder la serenidad, mirar con ojos compasivos, tener caridad con todos. Y pedir perdón tan pronto podamos por nuestros errores.

Recordé aquello que una vez leí:
“Cuando hablamos mal de una persona, o lo indisponemos ante otros, es como lanzarle un dardo envenenado al corazón. Pero ese dardo, antes de llegar a tu victima, primero atraviesa el corazón amable de Dios”.

En situaciones así, me encanta recordar este pensamiento de san Alberto Hurtado: “¿Qué haría Cristo en mi lugar?”.

Me parece que la respuesta es: Amar. Perdonar. Devolver bien por mal.

Una vez, un desconocido telefoneó a mi casa. Respondí y empezó a decir malas palabras y a ofender. Con calma, empecé a rezar en voz alta, mientras él hablaba:

“Dios te salve María, llena eres de gracia…”

La persona al escuchar mi oración se detuvo. Titubeó.
“Ehh… No sabía… perdone, perdone…” y colgó.

El amor todo lo puede. Y todo lo da.


LOS CINCO MINUTOS DE MARÍA, 1 DICIEMBRE


Los cinco minutos de María
Diciembre 1



Podríamos preguntarnos quién fue para la Virgen su prójimo.
Si recordamos que nuestro prójimo es simplemente todo aquel que tiene necesidad de nosotros, hemos de deducir que todos los hombres son para María “el prójimo”, porque todos necesitamos de ella y de hecho ella nos socorre a todos; así cumple ella el precepto de amar a Dios y al prójimo.
Nuestra Señora de la caridad, ayúdanos a descubrir el rostro de tu Hijo Jesús en el rostro de nuestros hermanos necesitados.


* P. Alfonso Milagro 

LOS CINCO MINUTOS DE MARÍA, 2 DICIEMBRE


Los cinco minutos de María
Diciembre 2




Con su amparo maternal la Madre celestial nos ayuda a vivir como cristianos auténticos: que nuestras obras respondan a nuestras palabras y nuestras palabras estén acordes con nuestros sentimientos y que nuestros sentimientos sean producto de nuestros pensamientos.

Que en todo nos asemejemos a la dulce Madre, toda pura, toda santa, toda inmaculada, toda luz.

María, poema que resuena en toda la creación, bendícenos para que seamos mejores cristianos.


* P. Alfonso Milagro

SEIS RECOMENDACIONES DE LA IGLESIA PARA VIVIR EL ADVIENTO


6 recomendaciones de la Iglesia para vivir el Adviento
Por María Ximena Rondón





 (ACI).- El Adviento es un tiempo de preparación para recibir la Navidad, donde celebramos el nacimiento de Jesucristo; y para vivirlo correctamente, es que el Vaticano ha elaborado una serie de recomendaciones.

Las recomendaciones que presentamos a continuación figuran en el Capítulo IV del Directorio sobre la Piedad Popular y la Liturgia, elaborado por la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos de la Santa Sede y publicado en el año 2002.

1.- Meditar sobre la fe y humildad de María

El Vaticano recordó que durante el Adviento “la Liturgia celebra con frecuencia y de modo ejemplar a la Virgen María”, especialmente en la Solemnidad de la Inmaculada Concepción, que se celebra el 8 de diciembre.

Por ello invita a reflexionar sobre “la actitud de fe y de humildad con que María de Nazaret se adhirió, total e inmediatamente, al proyecto salvífico de Dios”. La Santa Sede recomendó rezar la Novena a la Inmaculada Concepción. Esta inició el 29 de noviembre y puede encontrarla AQUÍ.

2.- No caer en el consumismo           

La Santa Sede advirtió que en la actualidad los valores del Adviento se ven “amenazados por la costumbre de convertir la preparación a la Navidad en una ‘operación comercial’, llena de propuestas vacías, procedentes de una sociedad consumista”.

Por ello, recomendaron orar y meditar para no olvidar el sentido del Adviento y celebrar el nacimiento de Jesús “en un clima de sobriedad y de sencillez alegre, y con una actitud de solidaridad para con los pobres y marginados”.

3.- Que toda la familia arme el pesebre de Belén

La Santa Sede recomendó que toda la familia participe en el armado del pesebre porque es una oportunidad para que “entren en contacto con el misterio de la Navidad”.

Invitaron a que “se recojan en un momento de oración o de lectura de las páginas bíblicas referidas al episodio del nacimiento de Jesús”.

4.- Rezar la Novena de Navidad

El Directorio sobre la Piedad Popular y la Liturgia indica que la Novena de Navidad es un ejercicio de piedad valioso que ayuda a preparar el corazón en los días previos a la celebración del nacimiento del Niño Jesús.

Destacaron que es una práctica antigua que “nació para comunicar a los fieles las riquezas de una Liturgia a la cual no tenían fácil acceso”.

La Novena de Navidad inicia el 16 de diciembre y termina el 24 de diciembre. Puede encontrarla AQUÍ.

5.- Profundizar en las lecturas bíblicas que invitan a la conversión


La Santa Sede recomendó profundizar en los pasajes bíblicos que se leerán durante el Adviento porque invitan a la conversión “mediante la voz de los profetas y sobre todo de Juan Bautista”.

Recordaron que “Dios mantenía, mediante las profecías, la esperanza de Israel en la venida del Mesías” y que “está sólidamente enraizada en el pueblo cristiano la conciencia de la larga espera que precedió a la venida del Salvador”.

6.- Participar en el rezo de la Corona de Adviento y las Posadas

El Vaticano indicó que el rezo de la corona y el encendido de sus cuatro velas se ha “convertido en un símbolo del Adviento en los hogares cristianos”.

Destacaron que en el encendido de cada vela, correspondiente a los cuatro domingos de Adviento, se recuerdan “las diversas etapas de la historia de la salvación antes de Cristo”.  

También invitaron a participar en la celebración de las “Posadas”, una “tradición española y latinoamericana” que representa “el camino de José y María hacia Belén, y su búsqueda de un lugar acogedor para el nacimiento de Jesús”.

EL EVANGELIO DE HOY SÁBADO 2 DICIEMBRE 2017


Lecturas de hoy Sábado de la 34ª semana del Tiempo Ordinario
Hoy, sábado, 2 de diciembre de 2017



Primera lectura
Lectura de la profecía de Daniel (7,15-27):

Yo, Daniel, me sentía agitado por dentro, y me turbaban las visiones de mi fantasía. Me acerqué a uno de los que estaban allí en pie y le pedí que me explicase todo aquello. 
Él me contestó, explicándome el sentido de la visión: «Esas cuatro fieras gigantescas representan cuatro reinos que surgirán en el mundo. Pero los santos del Altísimo recibirán el Reino y lo poseerán por los siglos de los siglos.» 
Yo quise saber lo que significaba la cuarta fiera, diversa de las demás; la fiera terrible, con dientes de hierro y garras de bronce, que devoraba y trituraba y pateaba las sobras con las pezuñas; lo que significaban los diez cuernos de su cabeza, y el otro cuerno que le salía y eliminaba a otros tres, que tenía ojos y una boca que profería insolencias, y era más grande que los otros. Mientras yo seguía mirando, aquel cuerno luchó contra los santos y los derrotó. Hasta que llegó el anciano para hacer justicia a los santos del Altísimo, y empezó el imperio de los santos.
Después me dijo: «La cuarta bestia es un cuarto reino que habrá en la tierra, diverso de todos los demás; devorará toda la tierra, la trillará y triturará. Sus diez cuernos son diez reyes que habrá en aquel reino; después vendrá otro, diverso de los precedentes, que destronará a tres reyes; blasfemará contra el Altísimo e intentará aniquilar a los santos y cambiar el calendario y la ley. Dejarán en su poder a los santos durante un año y otro año y otro año y medio. Pero, cuando se siente el tribunal para juzgar, le quitará el poder, y será destruido y aniquilado totalmente. El poder real y el dominio sobre todos los reinos bajo el cielo serán entregados al pueblo de los santos del Altísimo. Será un reino eterno, al que temerán y se someterán todos los soberanos.

Palabra de Dios


Salmo
Dn 3,82.83.84.85.86.87

R/. Ensalzadlo con himnos por los siglos

Hijos de los hombres, 
bendecid al Señor. R/.

Bendiga Israel al Señor. R/.

Sacerdotes del Señor, 
bendecid al Señor. R/.

Siervos del Señor, 
bendecid al Señor. R/.

Almas y espíritus justos, 
bendecid al Señor. R/.

Santos y humildes de corazón, 
bendecid al Señor. R/.


Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Lucas (21,34-36):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Tened cuidado: no se os embote la mente con el vicio, la bebida y los agobios de la vida, y se os eche encima de repente aquel día; porque caerá como un lazo sobre todos los habitantes de la tierra. Estad siempre despiertos, pidiendo fuerza para escapar de todo lo que está por venir y manteneros en pie ante el Hijo del hombre.»

Palabra del Señor





Comentario al Evangelio de hoy sábado, 2 de diciembre de 2017
Luis Manuel Suárez CMF



Queridos amigos:

Hoy es el último día del año litúrgico. Mañana comenzará el adviento.

La Palabra de este día contiene un mensaje breve, pero importante: nos invita a vivir despiertos y a mantenernos en pie. ¿Qué puede significar esto para ti?

Para algunos, vivir despiertos significará empezar a darse cuenta de las cosas; para otros, no dejar que las adicciones se adueñen de la vida; para otros, dejar de ser tan dependientes de otras personas y comenzar a caminar por uno mismo; para otros, no dejar que los agobios marquen el ritmo, respirar más hondo y tomar las cosas con más calma…

Vivir despiertos es vivir con los ojos abiertos. Y con esos ojos abiertos, ver las cosas como las ve Dios: con pasión, pero con horizonte. “Nada nos separará del amor de Dios”.

Vivir despiertos es tener sueños, pero no tenerlos tan elevados que suframos por no alcanzarlos.

Vivir despiertos es tener los pies en la tierra y la mirada en el cielo. En ese “equilibrio” en el que vivió Jesús.

Y mantenerse en pie, en medio de los cambios, las luchas, las dificultades. Así nos quiere Jesús ante él.

“Estad siempre despiertos, pidiendo fuerza para escapar de todo lo que está por venir y manteneros en pie ante el Hijo del hombre”. Que así sea. Y feliz entrada en el tiempo de Adviento-Navidad.

Vuestro hermano en la fe: 
Luis Manuel Suárez CMF (@luismanuel_cmf)

FELIZ FIN DE SEMANA!!




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