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viernes, 9 de enero de 2015

¿QUÉ ES UNA DIÓCESIS?


¿Qué es una diócesis?
Las diócesis pueden estar repartidas, por motivos organizativos, en zonas pastorales y en vicariatos foráneos


Por: Vatican Insider | Fuente: vaticaninsider.lastampa.it/es/



Es una iglesia particular definida por el Código de Derecho Canónico como la porción del pueblo de Dios, circunscrita territorialmente y cuyo cuidado pastoral es encomendado a un obispo. A las diócesis se asimilan la prelatura territorial, la abadía territorial, el vicariato apostólico, la prefectura apostólica, la administración apostólica erigida de manera estable y el ordinariato militar. Órganos fundamentales de la diócesis son: el obispo diocesano, que es quien está a cargo de la diócesis, eventualmente ayudado por obispos auxiliares o coadjutores; la Curia diocesana, formada por las personas y los organismos que ayudan al obispo en el gobierno; y el cabildo de canónigos. Las diócesis pueden estar repartidas, por motivos organizativos, en zonas pastorales y en vicariatos foráneos (conocidos también como decanatos o presbiterios).

¿Qué poderes tiene un obispo?

Al obispo, indicado como ordinario diocesano, se le encomienda el cuidado de una diócesis. El obispo, que es el representante legal de los intereses de la diócesis, gobierna la iglesia particular que le ha sido encomendada con la triple potestad: legislativa, que ejerce personalmente; ejecutiva, que ejerce por sí mismo o por medio de vicarios generales o episcopales; y judicial, que ejerce tanto personalmente como por medio del vicario judicial y de los jueces. Al llegar a los 75 años de edad, el obispo debe presentar su renuncia al Papa, quien proveerá teniendo en cuenta todas las circunstancias. El obispo cuya renuncia sea aceptaba conserva el título de obispo emérito de su diócesis, en cuyo ámbito puede mantener su residencia.

¿Qué diferencia hay entre un obispo y un arzobispo?
El arzobispo es un obispo al que se le atribuye una preeminencia, simplemente honorífica, sobre los demás obispos. La dignidad de un arzobispo se fundaba, en sus orígenes, en el hecho de que a los obispos de las metrópoli se les atribuía una preeminencia incluso jurisdiccional sobre los obispos de los municipios, que eran llamados obispos sufragáneos. Hoy en día, la dignidad del arzobispo no está necesariamente vinculada a una sede importante; en algunos casos, es un título puramente honorífico conferido por el Pontífice a la persona. Sólo en cuanto metropolitano, el arzobispo tiene obligaciones y jurisdicción claramente definidas por el Derecho Canónico.

¿Quiénes son los cardenales?

Son los más altos colaboradores del Pontífice. Sus oficios son de institución humana y no divina y, en conjunto, forman un colegio de naturaleza particular, denominado generalmente Sacro Colegio. Los cardenales colaboran con el Pontífice romano, tanto como colegio en el Consistorio, como de forma individual en los diferentes oficios, ofreciéndole sus obras en el cuidado, sobre todo, cotidiano de la Iglesia universal. Por norma, los cardenales son prepósitos en los dicasterios y en los demás organismos permanentes de la Curia romana y de la Ciudad del Vaticano, o bien son jefes de las más importantes diócesis de todo el mundo católico. El nombramiento (llamado también creación) de los cardenales le corresponde exclusivamente al Pontífice.

¿Cómo se elige a los cardenales?

La elección del Papa, explica el Dizionario di Diritto Canonico ed Ecclesiastico (Ed. Simone) (Diccionario de Derecho Canónico y Eclesiástico) debe recaer sobre hombres que al menos ya sean sacerdotes y que se destaquen por doctrina, moralidad, piedad y prudencia de comportamiento: aquellos que no sean ya obispos, después del nombramiento, deben recibir la consagración episcopal. Puede suceder que el Pontífice anuncie haber creado un cardenal, pero que no de a conocer el nombre (nomen in pectore sibi reservans). En ese caso, el designado deberá cumplir con los deberes y gozará de los derechos de los cardenales sólo en el momento de la sucesiva publicación (que a veces tiene lugar después de años) mientras que, a los efectos de las prioridades, valdrá la fecha de la reserva in pectore. El artículo 21 del Tratado entre Italia y la Santa Sede, así como varias normas internas, prevén para los cardenales numerosas series de prerrogativas, privilegios, inmunidades y exenciones.

¿Para qué sirve el Sacro Colegio?

El Colegio de Cardenales funciona, incluso oficiosamente, como senado del Pontífice y tiene personalidad jurídica canónica. La tarea principal del Sacro Colegio es la elección del Sumo Pontífice. Este colegio está presidido por el cardenal decano, de quien hace las veces el cardenal subdecano: ninguno de los dos tiene potestad alguna de gobierno sobre los demás cardenales, pero son considerados primus inter pares. El Sacro Colegio se distingue en tres órdenes: el orden de los cardenales obispos, al que pertenecen los purpurados a quienes el Sumo Pontífice asigna el título de una iglesia suburbicaria, y los patriarcas orientales que son nombrados cardenales; el orden de los cardenales sacerdotes, a quienes se les asigna el título de una iglesia de Roma; el orden de los cardenales diáconos, a quienes, en cambio, se les asigna el título de una diaconía romana.

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