Páginas

sábado, 15 de marzo de 2014

NO HAY CASUALIDAD... ESE ES DIOS


No hay casualidad... Ese es Dios


Alguna vez te has sentado por allí y de repente sientes deseos de hacer
algo agradable por alguien a quien le tienes cariño?
ESE ES DIOS...que te habla a través del Espiritu Santo.

Alguna vez te has sentido derrotado y nadie parece estar alrededor tuyo para hablarte?
ESE ES DIOS... Él quiere hablar contigo

Alguna vez has estado pensando en alguien a quién amas y no has visto por largo tiempo y la próxima cosa que pasa es verlo o recibir una llamada de esa persona?
ESE ES DIOS...no existe la coincidencia.

Alguna vez has recibido algo maravilloso que ni siquiera pediste?
ESE ES DIOS...que conoce los secretos de tu corazón.

Alguna vez has estado en una situación problemática y no tenías indicios de cómo se iba a resolver y de pronto todo queda resuelto sin darte cuenta?
ESE ES DIOS...que toma nuestros problemas en sus manos les da solución.

Alguna vez has sentido una inmensa tristeza en el alma y al día siguiente la tristeza ha pasado?
ESE ES DIOS...que te dio un abrazo de consuelo y te dijo palabras dulces.

Alguna vez te has sentido tan cansado de todo, al grado de querer morir y de pronto un día sientes que tienes la suficiente fuerza para continuar?
ESE ES DIOS...que te cargó en sus brazos para darte descanso.

Alguna vez has sentido que tienes tantos problemas y las cosas ya se están saliendo de su cauce y de pronto un día todo está resuelto?
ESE ES DIOS...que tomó todas las cosas y las puso en su lugar.

Todo es tan sencillo como....PONERSE EN MANOS DE DIOS...

¿Piensas que este mensaje te fue enviado accidentalmente?...
FUE DIOS...que me iluminó y me recordó que estas ahí, que eres mi amigo

ORACIÓN DE LOS NOVIOS


Plegaria de los novios


Somos novios, Señor, y nos queremos mucho.

Hace tiempo nos encontramos y nos reconocimos, como si siempre nos hubiéramos buscado.

Qué experiencia maravillosa, para cada uno, sentirse elegido, preferido sin saber del todo por qué.

Sentimos Tu presencia, Señor, y te damos gracias por haber hecho posible este amor.

Queremos no olvidarte: para que seamos abiertos y sinceros; para que busquemos el bien y la alegría del otro con comprensión; para que nos esforcemos en cambiar y ofrecernos cada uno lo mejor de sí mismo; para que el deseo y la pasión no ahoguen el amor; para que juntos forjemos un ideal-vocación para la vida y nos unamos para alcanzarlo.

Un día, Señor, pensamos sellar para siempre nuestro amor con el sacramento del matrimonio. Que nuestro noviazgo sea un camino de maduración y seamos conscientes del compromiso mutuo que asumiremos. 

Amén.

ORACIÓN PARA REZAR EN TODO MOMENTO


Oración para rezar en todo momento
Autor: San Ignacio de Loyola


Señor, de verdad deseo prepararme bien
para este momento, deseo profundamente que
 todo mi ser esté atento y dispuesto para Ti.

Ayúdame a clarificar mis intenciones.
purifica mis sentimientos, santifica
mis pensamientos y bendice mis esfuerzos,
para que todo en mi vida sea de acuerdo
a tu voluntad.

Tengo tantos deseos contradictorios...
Me preocupo por cosas que ni importan
ni son duraderas.
Pero sé que si te entrego mi corazón
haga lo que haga seguiré a mi nuevo corazón.

En todo lo que hoy soy, en todo lo que intente hacer,
en mis encuentros, reflexiones,
incluso en las
frustraciones y fallos
y sobre todo en este rato de oración,
en todo ello, haz que ponga mi vida en tus manos.

Señor, soy todo tuyo. Haz de mí lo que Tú quieras

Amén.

OCÉANO



Océano


¡Siente el viento, como suavemente acaricia tu piel...! 

¡Percibe el olor que brota de estas aguas profundas!

Escucha el cantar de las sirenas, el aleteo de los peces;
recoge tus pensamientos y échalos todos al mar; 
el agua los purificará 
y los devolverá a ti con más claridad...

¡Recuerda que, eres el protagonista de esta historia...!

Siente las olas como chocan con tu cuerpo, 
humedeciendo tu piel palmo a palmo.

¡Recibe esa paz que el paisaje te ofrece 
y deja que tus problemas se sumerjan, 
hasta hundirse en el fondo, sin poder flotar...!

¡Las aguas te invitan a sumergirte! 
Tu cuerpo te lo pide sin cesar.

En tus manos está la decisión.
Penetra en este misterioso mundo 
y solamente déjate llevar...

¡Echa tus problemas al mar!

A veces es necesario llorar.
Las lágrimas purifican el alma 
y tu ser liberarás de esas ataduras.

¡Desde ahora te llenarás de paz, 
y con amor, todo lo enfrentarás!

Sumérgete en su profundidad; 
permite que tus heridas sanen.

¡Despéjate de los pensamientos negativos: 
todos tus resentimientos, tus corajes, 
tus penas, tus dudas, tu cansancio...!

¡Llénate de cosas positivas; 
piensa que cada día es uno nuevo; 
que mañana serás una nueva persona...!

¡Mímate, eres un ser humano único!

¡Deja que el agua purifique tu mente; 
echa tu alma a volar y sueña...!

EL EVANGELIO DE HOY: 15 DE MARZO DEL 2014

Autor: Héctor Bárcenas Gómez | Fuente: Catholic.net
Cambiar al mundo sin hacer ruido
Mateo 5, 43-48. Cuaresma. Saber perdonar es un don y una gracia, pero está al alcance ¡aunque nos parezca imposible!
 
Cambiar al mundo sin hacer ruido
Del santo Evangelio según san Mateo 5, 43-48 

Habéis oído que se dijo: Amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo. Pues yo os digo: Amad a vuestros enemigos y rogad por los que os persigan, para que seáis hijos de vuestro Padre celestial, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos. Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa vais a tener? ¿No hacen eso mismo también los publicanos? Y si no saludáis más que a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de particular? ¿No hacen eso mismo también los gentiles? Vosotros, pues, sed perfectos como es perfecto vuestro Padre celestial.

Oración introductoria

Aquí estoy, Señor, en tu presencia. Quiero estar contigo estos momentos para que llenes mi corazón de tu amor, de tu bondad. Tú conoces mi alma, sabes cuánto me cuesta salir de mí mismo y amar de verdad. Por eso, vengo a ti, que eres la fuente de amor, para que acercándome tanto a la hoguera de tu caridad, mi corazón y mi vida ardan en tu amor.

Petición

Señor, llena mi corazón de tu amor.

Meditación del Papa Francisco

Jesús nos invita a ser prefectos como el Padre es perfecto. Y Jesús perdona a sus enemigos. Vengarse no es cristiano. ¿Cómo podemos entonces lograr a amar a nuestros enemigos?
Rezando porque cuando uno reza por quien te hace sufrir, es como si el Señor viene con el aceite y prepara nuestros corazones a la paz. ¡Rezar! Es lo que Jesús nos aconseja: Recen por sus enemigos, por aquellos que les persiguen. ¡Recen! Y díganle a Dios: Cámbiale el corazón, tiene un corazón de piedra, pero cámbialo, dale un corazón de carne, que sienta el bien y que ame.
¿Rezo yo por mis enemigos? ¿Rezo por aquellos que no me quieren? Si nosotros decimos "sí", yo les digo: sigan adelante, recen más, ese es un buen camino. Si la respuesta es "no", el Señor dice: Pobrecito, también tú eres enemigo de los otros. [...]
¡Para los criterios del mundo no es un buen negocio! Pero este es el camino que recorrió Jesús, que de rico se hizo pobre por nosotros. En una pobreza en la que está la gracia que nos justifica a todos y nos hace ricos porque es el misterio de la salvación. (Cf. S.S. Francisco, 18 de junio de 2013, homilía en la capilla de Santa Marta). 

Reflexión 

La cadena de injusticia es como una fila donde diez personas están formadas. El primero de la fila se voltea y le pega al segundo, éste a su vez repite lo mismo con el que tiene atrás y así se siguen. Pero al llegar al quinto miembro de la fila, éste, al voltearse, le da un abrazo al de atrás y perdona al que le golpeó. Rompe la cadena de violencia. Absorbe violencia y responde con amor. Esto es lo que Cristo vino a enseñarnos, viviéndolo él en primera persona. Ante todas las ofensas que recibe, mías y de tanta otra genta, su respuesta siempre es la misma: amor y perdón. Y esto lo podemos vivir en las situaciones más ordinarias de nuestra vida, ante una queja, ante la crítica que recibimos, un mal gesto, una ofensa, al ser olvidados en algo importante u otra situación diaria. Pero esto requiere una profunda actitud de humildad, la cual sólo lograremos aprendiendo en la oración con Cristo.

Propósito

Responder con un gesto de amor (una sonrisa, la palabra "gracias", con paciencia, con perdón...) las ofensas que reciba el día de hoy.

Diálogo con Cristo

Jesús, Tú que eres manso y humilde de corazón, enséñame la virtud de saber amar a mis enemigos, a aquellos que me ofenden, a comprenderlos o tan sólo saber perdonarlos. Es difícil, pero sé que contigo nada es imposible. Llena mi corazón de tu amor a tal grado que pueda transmitir tu amor a todos los que me rodean. Que tu corazón, Señor, lata en mi pecho toda mi vida.

La medida del amor es amar sin medida (San Agustín)


  • Preguntas o comentarios al autor
  • Héctor Bárcenas Gómez, L.C.