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jueves, 27 de febrero de 2014

CINCO PRIMEROS SÁBADOS DE REPARACIÓN AL INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA


CINCO PRIMEROS SÁBADOS DE REPARACIÓN
EN HONOR AL INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA 


Lucía, vidente de Fátima, era postulante en el Convento de las Doroteas en Pontevedra, España cuando tiene una aparición de la Virgen sobre una nube de luz, con el Niño Jesús a su lado. La Santísima Virgen puso su mano sobre el hombro de Lucía, mientras en la otra sostenía su corazón rodeado de espinas. El Niño le dijo: "Ten compasión del Corazón de tu Santísima Madre. Está cercado de las espinas que los hombres ingratos le clavan a cada momento, y no hay nadie que haga un acto de reparación para sacárselas."

Inmediatamente dijo Nuestra Señora a Lucía:
"Mira, hija mía, mi Corazón cercado de espinas que los hombres ingratos me clavan sin cesar con blasfemias e ingratitudes. Tú, al menos, procura consolarme y di que a todos los que, durante cinco meses, en el primer sábado, se confiesen, reciban la Sagrada Comunión, recen el Rosario y me hagan compañía durante 15 minutos meditando en los misterios del rosario con el fin de desagraviarme les prometo asistir en la hora de la muerte con las gracias necesarias para su salvación"

Lucía le habló (a Jesús) de la confesión para los primeros sábados y preguntó si valía hacerla en los ocho días. Jesús contestó: "Sí; todavía con más tiempo, con tal que me reciban en estado de gracia y tengan intención de desagraviar al Inmaculado Corazón de María".
La intención de hacer esta reparación al Inmaculado Corazón de María puede ponerse al principio.

¿Por qué 5 Sábados?

Después de haber estado Lucía en oración, Nuestro Señor le reveló la razón de los 5 sábados de reparación:  "Hija mía, la razón es sencilla: se trata de 5 clases de ofensas y blasfemias proferidas contra el Inmaculado Corazón de María:
1-  Blasfemias contra su Inmaculada Concepción.
2-  Contra su virginidad.
3-  Contra su Maternidad Divina, rehusando al mismo tiempo recibirla como Madre de los hombres.
4-  Contra los que procuran públicamente infundir en los corazones de los niños, la indiferencia, el desprecio y hasta el odio hacia la Madre Inmaculada.
5-  Contra los que la ultrajan directamente en sus sagradas imágenes.”

"He aquí hija mía, por que ante este Inmaculado Corazón ultrajado, se movió mi misericordia a pedir esta pequeña reparación, y, en atención a Ella, a conceder el perdón a las almas que tuvieran la desgracia de ofender a mi Madre. En cuanto a ti procura incesantemente con tus oraciones y sacrificios moverme a misericordia para con esas almas".

EL DESEO

El deseo
Autor: Paulo Coelho


En la edad media, las catedrales góticas eran construidas por varias generaciones. Este esfuerzo prolongado ayudaba a los participantes a organizar su pensamiento, agradecer y soñar.

Hoy el romanticismo acabó, una construcción es apenas un negocio más. Entre tanto, el deseo de construir permanece. Mucha gente dedica el final de sus vidas para terminar una casa, perfeccionar un jardín, levantar una capilla.

También nosotros precisamos ejercer este derecho; si no tenemos una catedral, reconstruiremos nuestro cuarto. Esto nos ayudará a conocer mejor quienes somos. Nos hará modificar una serie de cosas que nos están incomodando.
Tanto las iglesias como los hombres sufren del desgaste del tiempo – es por eso que no se pueden detener nunca.

EL AGRICULTOR



El Agricultor

No, yo no puedo aceptar una recompensa por lo que hice." respondió el agricultor inglés, rechazando la oferta.  En ese momento el propio hijo del agricultor salió a la puerta de la casa  de la familia.

"¿Es ese su hijo?" preguntó el noble inglés.
"Si," respondió el agricultor lleno de orgullo.
"Le voy a proponer un trato. Déjeme llevarme a su hijo y ofrecerle
una  buena educación. Si el es parecido a su padre crecerá hasta
convertirse en un hombre del cual usted estará muy orgulloso."

El agricultor aceptó.  Con el paso del tiempo, el hijo de Fleming el
agricultor se graduó de la  Escuela de Medicina de St. Mary's Hospital en Londres, y se convirtió en un personaje conocido a través del mundo, el notorio Sir Alexander Fleming, el descubridor de la Penicilina.  Algunos años después, el hijo del noble inglés, cayó enfermo de pulmonía.  Que lo salvó? La Penicilina.

El nombre del noble inglés??  Randolph Churchill.
El nombre de su hijo??  Sir Winston Churchill.
Alguien dijo una vez: Siempre recibimos a cambio lo mismo que
ofrecemos.

Trabaja como si no necesitaras el dinero.
Ama como si nunca te hubieran herido.
Baila como si nadie te estuviera mirando.

HOY ES JUEVES, SEÑOR, Y YO TE DOY MI DOLOR



Autor: Ma Esther De Ariño | Fuente: Catholic.net
Hoy es jueves, Señor, y yo te doy mi dolor
No soy yo el que voy a Ti. Tú eres el que viene a mi. Te acercas a mí porque sabes de mi sufrimiento, de mi dolor.


Llegué ayer del Hospital a mi casa. Hoy es jueves Señor, y voy a estrenar mi silla de ruedas. Voy a ocupar un lugar del cual ya no me moveré. 

Hoy es jueves y muchas personas al comenzar el día se habrán levantado de su cama, habrán puesto los pies en el suelo y comenzado a hacer una y mil actividades distintas...seguro que no se han detenido a gustar de ese milagro: ¡poder caminar!. A mí me han tenido que traer a esta Capilla para contarte mis "cosas". 

Hoy es jueves Señor, y recuerdo que también era jueves el día en que por primera vez fui a tu encuentro en mi Primera Comunión, después.... ¡cuánto brinco, cuántos juegos, cuántas carreras, cuántos bailes...!. Y años después, la "palomilla" escogió un día jueves para ir por primera vez un rato a la "disco" de moda... 

Hoy es jueves también pero estoy atado a mi silla de ruedas. Voy a estar en ella para siempre. Y hoy, mientras te miro me he puesto a pensar en Ti, Señor, y he sentido que como aquel día de mi Primera Comunión, no soy yo el que voy a Ti. Tú eres el que viene a mi. Te acercas a mí porque sabes de mi sufrimiento, de mi dolor. Y yo te voy a hacer una pregunta, no ¿por qué, por qué a mi?. Eso solo lo sabes Tu. Te voy a preguntar, ¿para qué, para qué me tienes prisionero sin que mis pies vuelvan a pisar el campo, las playas... a correr, a caminar?. Y al hacerte esa pregunta queda inherente a ella mi entrega, mi aceptación, porque en mi se está haciendo Tu voluntad. Y sigue la pregunta, ¿para qué este cambio radical en mi vida?. 

Tu Jesús, me lo vas a decir. Soy todo oídos, mi alma está alerta, mi corazón preparado. Tu me vas a decir qué quieres de mí en esta nueva forma de vida. 

Dicen que hay pocos misioneros, que allá en las tierras donde están hace mucho calor, que se enferman, que sufren... que hasta los matan. Yo puedo ser misionero como lo fue la Santa de Lisieux, la pequeña Teresita sin salir del Convento, porque puedo ofrecer mi inmovilidad por el sufrimiento de unos pies hinchados, cansados de caminar por brechas y caminos lodosos para llevar la Palabra del Señor al corazón de los hombres y mujeres que no lo conocen. 

Señor, tu estás junto a mí y ya me estás hablando... porque antes nunca pensé en estas cosas. Mi vida era alocada, vacía estéril... Ahora soy tierra fértil para la semilla de Tu palabra. La llama del dolor quemó en mi corazón toda la mala hierba y ahora lo siento acrisolado y limpio. Soy hombre nuevo. 

Hoy es jueves, Señor, y voy a tender las alas de mi espíritu para adorarte aquí, para acompañarte en todos los Sagrarios del mundo, para hacerte compañía en Tu soledad, en Tu eterna espera, en Tu absoluta entrega. También te veo en la Cruz, inmóvil, clavado, así... como estoy yo. Y sin embargo tus manos y tus pies clavados nos vinieron a dar la libertad sobre la esclavitud del pecado. Nos dieron el triunfo sobre la muerte y nos hicieron hombres y mujeres nuevos. 

Háblame, Señor, dime que quieres de mi... Hoy es jueves, Señor, y yo te doy mi dolor y Tu a cambio dame conformidad para mi nueva vida y déjame Tu Paz como el mejor de los regalos. 

ORACIÓN A JESÚS EUCARISTÍA


ORACIÓN A JESÚS EUCARISTÍA

De nuevo aquí me tienes Jesús mío,
Confuso y humillado ante tu altar.
Sin saber que decirte ni que hablarte.
Ansioso solamente de llorar.
Vengo del mundo, vengo del combate,
Cansado de sufrir y de luchar.

Traigo el alma llena de tristezas,
Y hambriento el corazón de soledad.
De esa soledad dulce, divina,
Que alegra tu presencia celestial.

Donde el alma tan solo con mirarte,
Te dice lo que quiere sin hablar.
Mis miserias Señor aquí me traen,
Mírame con ojos de piedad.

Soy el mismo de siempre, dueño mío,
Un abismo infinito de maldad,
Un triste pecador siempre caído,
Que llora desconsolado su orfandad.
Y gime bajo el peso de sus culpas,
Y ansía recobrar su libertad.

Soy un alma sedienta de ventura,
Un corazón que muere por amar.
Y abrazarse a la llama inextinguible,
Del fuego de tu eterna caridad.

Concédeme Señor que a ti me acerque,
Permite que tus pies llegue a besar.
Déjame que los riegue con mi llanto,
Y sacie en ellos mi ardoroso afán.

Oh, que bien se está aquí mi dueño amado,
Ante las gradas de tu santo altar.
Bebiendo de la fuente de aguas vivas,
Que brota de tu pecho sin cesar.

Quién pudiera vivir eternamente,
En aquella divina soledad.
Gozando de tu amor y tu hermosura,
En un éxtasis dulcísimo de paz .

Amén.

EL EVANGELIO DE HOY: 27-02-2014

Autor: Juan José Hernández | Fuente: Catholic.net
Ustedes son la luz del mundo
Marcos 9, 41-50. Tiempo Ordinario. Esforcémonos por vivir una vida coherente con la fe que profesamos, para que seamos faros que alumbran en la oscuridad.
 
Ustedes son la luz del mundo


Del santo Evangelio según san Marcos 9, 41-50

Les aseguro que no quedará sin recompensa el que les dé de beber un vaso de agua por el hecho de que ustedes pertenecen a Cristo. Si alguien llegara a escandalizar a uno de estos pequeños que tienen fe, sería preferible para él que le ataran al cuello una piedra de moler y lo arrojaran al mar. Si tu mano es para ti ocasión de pecado, córtala, porque más te vale entrar en la Vida manco, que ir con tus dos manos a la Gehena, al fuego inextinguible. Y si tu pie te está haciendo caer, córtatelo; porque más te vale entrar lisiado en la Vida, que ser arrojado con tus dos pies a la Gehena. Y si tu ojo prepara tu caída, sácatelo; pues es mejor para ti entrar con un solo ojo en el Reino de Dios que ser arrojado con los dos al infierno, donde el gusano no muere y el fuego no se apaga. Porque cada uno será salado por el fuego. La sal es una cosa excelente, pero si se vuelve insípida, ¿con qué la volverán a salar? Que haya sal en ustedes mismos y vivan en paz unos con otros».

Oración introductoria

Dios mío, Tú me has llamado a una misión sublime y para cumplirla con fidelidad tengo que alimentarme espiritualmente. De este modo escucharé lo que Tú me pides cotidianamente y recibiré las gracias necesarias para responderte con fidelidad, no sólo hoy, sino cada día de mi vida.

Petición

Señor, permíteme ver las faltas que hay en mí y dame tu luz para reconocer en ti el ejemplo que debo imitar.

Meditación del Papa Francisco

Es tan difícil de cortar con una situación de pecado. ¡Es difícil! Incluso en una tentación, ¡es difícil! Pero la voz de Dios nos dice esta palabra: ´¡Escapa! No se puede luchar allí, porque el fuego, el azufre te matarán. ¡Escapa!´.
Santa Teresita del Niño Jesús nos enseña que a veces, en algunas tentaciones, la única solución es escapar y no tener vergüenza de escapar; reconocer que somos débiles y que tenemos que escapar. Y nuestro pueblo en su sencilla sabiduría lo dice un poco irónicamente: ‘Soldado que huye sirve para otra guerra’. Escapar para seguir adelante por el camino de Jesús. El ángel dice "no mires atrás", para escapar y mirar hacia adelante. Aquí hay un consejo para vencer la nostalgia del pecado. Pensemos en el Pueblo de Dios en el desierto, lo tenía todo, las promesas, todo. Sin embargo, estaba la nostalgia de las cebollas de Egipto y esta nostalgia les hizo olvidar que aquellas cebollas las comían en la mesa de la esclavitud. Era la nostalgia de volver, volver.(S.S. Francisco, 2 de julio de 2013, homilía en misa matutina en capilla de Santa Marta). 

Reflexión apostólica

La respuesta que le hemos dado a Cristo requiere una renovación diaria para no correr el peligro de alejarnos de Él hasta el punto de destruir nuestra amistad con el Señor. Esforcémonos por vivir una vida coherente con la fe que profesamos para que, además de asegurar nuestra salvación, seamos faros que alumbran en la oscuridad, sal que da sabor a la sociedad.

Propósito

En diversos momentos del día puedo elevar una oración a Dios pidiéndole que asemeje mi corazón más al de Él.

Diálogo con Cristo

Jesús sé que Tú quieres que yo sea santo (cf. Mt 5,48) y me has indicado el camino que debo seguir. Ayúdame a mantenerme cerca a las fuentes de tu gracia, especialmente la oración, los sacramentos y la caridad activa para que mi vida cristiana no pierda su sabor. Entonces podré decir con san Pablo: «tengo la certeza de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los principados, ni lo presente ni lo futuro, ni los poderes espirituales, ni lo alto ni lo profundo, ni ninguna otra criatura podrá separarnos jamás del amor de Dios, manifestado en Cristo Jesús, nuestro Señor.» (Rom 8,49-50).


Podemos llegar a ser grandísimos santos con sólo quererlo. La santidad no es un lujo para unos pocos, sino una sencilla obligación también para ti y para mi. (Madre Teresa de Calcuta)



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