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miércoles, 15 de febrero de 2012

ADORA Y CONFIA



Adora y Confía

No te inquietes por las dificultades de la vida, por sus altibajos, por sus decepciones, por su porvenir más o menos sombrío.

Quiere tú, lo que Dios quiere. Ofrécele en medio de inquietudes y dificultades el sacrificio de tu alma sencilla que, pese a todo, acepta los designios de Su providencia.

Poco importa que te consideres un fracasado si Dios te considera plenamente realizado a su gusto.

Piérdete confiado ciegamente en ese Dios que te quiere para Sí y que llegará a ti, aunque no lo veas. Cuánto más decaído y triste te sientas, tanto más piensa que estás en sus manos, fuertemente cogido.

Vive feliz, vive en paz que nada te altere; que nada -ni la fatiga ni tus fallos-, sea capaz de quitarte la paz.

Haz que brote y conserva siempre sobre tu rostro una dulce sonrisa, reflejo de la que el Señor, continuamente, te dirige. Y en el fondo de tu alma coloca, antes que nada, todo aquello que te llene de la paz de Dios.

Adora y confía en Dios, porque Él te tomará en sus brazos y te hará volar..., volar como un águila
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EL BURRO Y SU HISTORIA


Autor: P. Dennis Doren L.C. | Fuente: Catholic.net
El burro y su historia
Lo importante para nosotros cristianos, es que tengamos muy bien puestas nuestras ideas en la cabeza y en el corazón.
 




El ambiente en que vivimos los hombres cada día es más hostil y complicado, nos confunden, y a la hora de la hora hasta nos hacen dudar; ¿lo que estamos haciendo está bien o está mal? nos preguntamos. ¿Cómo satisfacer el querer y el parecer de todos? labor difícil, más aún en un mundo con tanta información, tan cambiante y con tantas apreciaciones personales.

Lo importante para nosotros cristianos, es que tengamos muy bien puestas nuestras ideas en la cabeza y en el corazón, para que no pensemos, hablemos y actuemos como la mayoría lo hace, de lo contrario, seremos como veletas que se mueven de acuerdo al viento, y eso sí que sería catastrófico.

Vivamos nuestros valores, actuemos según nuestra conciencia formada y madura con los principios correctos y con la certeza de que lo que importa no es lo que dirán, sino lo que ve Dios y el bien objetivo que tengo que hacer. Él sabe perfectamente mi intención y las convicciones que me mueven a actuar... ¿Cuántos de nosotros tal vez vivimos lo que esta familia vivió? no sé si decir, pobre burro o  pobre familia. Al final, tú puedes sacar tu propia conclusión, esperamos coincidir…

Había una vez un matrimonio con un hijo de doce años y un burro. Decidieron viajar, trabajar y conocer el mundo. Así, se fueron los tres con su burro.

Al pasar por el primer pueblo, la gente comentaba: “¡Mira ese chico mal educado; él arriba del burro y los pobres padres, ya grandes, llevándolo de las riendas!”. Entonces, la mujer le dijo a su esposo: No permitamos que la gente hable mal del niño. El esposo lo bajó y se subió él.

Al llegar al segundo pueblo, la gente murmuraba: “¡Mira qué sinvergüenza ese tipo; deja que la criatura y la pobre mujer tiren del burro, mientras él va muy cómodo encima!”. Entonces, tomaron la decisión de subirla a ella al burro, mientras padre e hijo tiraban de las riendas.

Al pasar por el tercer pueblo, la gente comentaba: “¡Pobre hombre! Después de trabajar todo el día, debe llevar a la mujer sobre el burro y pobre hijo ¡qué le espera con esa madre!”. Se pusieron de acuerdo y decidieron subir los tres al burro para comenzar nuevamente su peregrinaje.

Al llegar al pueblo siguiente, escucharon que los pobladores decían: “¡Son unas bestias, más burros que el burro que los lleva, van a partirle la columna!”

Por último, decidieron bajarse los tres y caminar junto al burro.

Pero al pasar por el pueblo siguiente no podían creer lo que las voces decían sonrientes: “¡Mira a esos tres mensos: caminan, cuando tienen un burro que podría llevarlos!”

¿Cómo complacer a todos?, realmente un misterio y una proeza, ¡vaya aventurita que se dieron estos pobres! Siempre habrá alguien que te critique, que hable mal de tí y será difícil que encuentres alguien a quien le conformen tus actitudes.

Entonces:

¡Vive como creas y según tus principios! ¡Haz lo que te dictamine tu conciencia y el corazón! Una vida es una obra de teatro que no permite ensayos.

Por eso:

¡Vive tu vida, no solo existas, cada día canta, ríe, ama, crece y lucha por tus convicciones! ¡Vive intensamente cada momento de tu vida antes que el telón baje y la obra termine sin aplausos!