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sábado, 5 de noviembre de 2011
ALÉGRATE....
Alégrate
Autor: Amado Nervo
Si eres pequeño, alégrate;
porque tu pequeñez sirve de contraste
a otros en el universo; porque esa pequeñez
constituye la razón esencial de su grandeza;
porque para ser ellos grandes,
han necesitado que tu seas pequeño,
como la montaña para culminar
necesita alzarse entre colinas, lomas y cerros.
Si eres grande, alégrate, porque lo inevitable se manifestó en ti
de manera excelente, porque eres un éxito del artista eterno.
Si eres sano, alégrate; porque en ti las fuerzas de la naturaleza
han llegado a la ponderación y a la armonía.
Si eres enfermo, alégrate; porque luchan en tu organismo
fuerzas contrarias que acaso buscan una resultante de belleza
porque en ti se ensaya ese divino alquimista que se llama el dolor.
Si eres rico, alégrate, por toda la fuerza que el Destino
ha puesto en tus manos para que la derrames...
Si eres pobre, alégrate; porque tus alas serán más ligeras;
porque la vida te sujetará menos; porque el Padre realizara en ti
más directamente que en el rico, el amable prodigio periódico del pan cotidiano...
Alégrate si amas; porque eres más semejante a Dios que los otros.
Alégrate si eres amado; porque hay en esto una predestinación maravillosa.
Alégrate si eres pequeño,
alégrate si eres grande;
alégrate si tienes salud;
alégrate si la has perdido;
alégrate si eres rico;
si eres pobre, alégrate;
alégrate si te aman;
si amas, alégrate;
¡alégrate, siempre,
siempre, siempre!
Autor: Amado Nervo
Si eres pequeño, alégrate;
porque tu pequeñez sirve de contraste
a otros en el universo; porque esa pequeñez
constituye la razón esencial de su grandeza;
porque para ser ellos grandes,
han necesitado que tu seas pequeño,
como la montaña para culminar
necesita alzarse entre colinas, lomas y cerros.
Si eres grande, alégrate, porque lo inevitable se manifestó en ti
de manera excelente, porque eres un éxito del artista eterno.
Si eres sano, alégrate; porque en ti las fuerzas de la naturaleza
han llegado a la ponderación y a la armonía.
Si eres enfermo, alégrate; porque luchan en tu organismo
fuerzas contrarias que acaso buscan una resultante de belleza
porque en ti se ensaya ese divino alquimista que se llama el dolor.
Si eres rico, alégrate, por toda la fuerza que el Destino
ha puesto en tus manos para que la derrames...
Si eres pobre, alégrate; porque tus alas serán más ligeras;
porque la vida te sujetará menos; porque el Padre realizara en ti
más directamente que en el rico, el amable prodigio periódico del pan cotidiano...
Alégrate si amas; porque eres más semejante a Dios que los otros.
Alégrate si eres amado; porque hay en esto una predestinación maravillosa.
Alégrate si eres pequeño,
alégrate si eres grande;
alégrate si tienes salud;
alégrate si la has perdido;
alégrate si eres rico;
si eres pobre, alégrate;
alégrate si te aman;
si amas, alégrate;
¡alégrate, siempre,
siempre, siempre!
COMENZAR...
Comenzar...
Que tiene de importante el comienzo de un nuevo año?
Muchos piensan que es un nuevo comienzo, es el dejar atrás las cosas viejas y empezar otras nuevas. Pero yo te digo... no pienses que el comenzar requiere un nuevo año.
No importa la estación... No importa el dia o la hora... No
importa si te perdiste en el camino... lo que tienes que hacer es bajar tu cabeza y pedirle al Padre que perdone tus pecados...
Entonces puedes comenzar de nuevo. Un nuevo comienzo... una nueva vida. No te preocupes si tropiezas y caes porque el Señor siempre te recogerá cuando le llames.
Olvida las resoluciones de año nuevo... haz un compromiso de caminar en la luz de Cristo, entonces te regocijaras cada dia de tu vida.
Así que recuerda, amigo/a, no esperes por las campanadas de medianoche, sino que coge tu Biblia hoy y lee Su Santa Palabra y simplemente comienza...
Que tiene de importante el comienzo de un nuevo año?
Muchos piensan que es un nuevo comienzo, es el dejar atrás las cosas viejas y empezar otras nuevas. Pero yo te digo... no pienses que el comenzar requiere un nuevo año.
No importa la estación... No importa el dia o la hora... No
importa si te perdiste en el camino... lo que tienes que hacer es bajar tu cabeza y pedirle al Padre que perdone tus pecados...
Entonces puedes comenzar de nuevo. Un nuevo comienzo... una nueva vida. No te preocupes si tropiezas y caes porque el Señor siempre te recogerá cuando le llames.
Olvida las resoluciones de año nuevo... haz un compromiso de caminar en la luz de Cristo, entonces te regocijaras cada dia de tu vida.
Así que recuerda, amigo/a, no esperes por las campanadas de medianoche, sino que coge tu Biblia hoy y lee Su Santa Palabra y simplemente comienza...