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martes, 27 de febrero de 2018

4 RAZONES PARA ORAR CON EL VIACRUCIS DIARIAMENTE


4 razones para orar con el Viacrucis diariamente
Muchos santos han obtenido grandes beneficios de acompañar a Jesús en su camino al Calvario


Por: Philip Kosloski | Fuente: www.philipkosloski.com // Píldoras de Fe 




El Viacrucis es una de las devociones más descuidadas en la oración católica diaria. A menudo se nos anima a rezar el Rosario, la Coronilla de la Divina Misericordia, y la Liturgia de las Horas (que todas son bastante recomendables) pero no recuerdo a alguien que me haya sugerido rezar diariamente el Viacrucis.

Esto es lamentable, ya que muchos de los santos han obtenido grandes beneficios de acompañar a Jesús en su camino al Calvario y muchos fueron inspirados a componer sus propias versiones de la antigua devoción.

Así que aquí están cuatro razones (en ningún orden en particular) del por qué deberíamos considerar rezar el Viacrucis diariamente:

1. El Viacrucis remonta su origen a la Santísima Virgen María

Una antigua tradición dice que María visitó los lugares de sufrimiento, muerte y resurrección de Jesús a diario después de su ascensión al cielo. Esto se supo incluso antes de que las otras tradiciones dijeran que María siguió a Jesús a lo largo de su amargo Vía Crucis que lo llevó al Calvario, al menos la Escritura como mínimo testifica que María estaba allí, al pie de la Cruz.

Así que María fue la primera en acompañar a Jesús en sus sufrimientos y mantuvo todas estas cosas en su corazón, reflexionando a diario en ellas después de la ascensión del Señor.

2. El Viacrucis nos permite visitar la Tierra Santa

Alrededor del siglo 17, los franciscanos empezaron a desarrollar un "Camino de la Cruz" en las iglesias locales por el que los fieles podían caminar a través de la narración de la pasión sin tener que ir a Jerusalén. He aquí una breve historia:

“En 1686, Inocencio XI, concedió a los franciscanos, en respuesta a su petición, el derecho de erigir las Estaciones del Viacrucis en todas sus iglesias, y declaró que todas las indulgencias que habían sido dadas por visitar devotamente las escenas reales de la pasión de Cristo, podrían ser ganadas por los franciscanos y otros afiliados a su orden si hacían el Viacrucis en sus propias iglesias en la forma acostumbrada. Inocencio XII confirmó el privilegio en 1694 y Benedicto XIII en 1726 lo extendió a todos los fieles. En 1731 Clemente XII lo extendió aún más permitiendo las indulgentes estaciones a todas las iglesias, siempre y cuando se levantaran por un padre franciscano con la sanción de lo común. Al mismo tiempo fijó el número definitivo de estaciones, quedando en catorce”. (Extracto de Enciclopedia Católica Énfasis añadido)

Además, de cierta manera (muy real) también podemos acompañar el sufrimiento y la persecución que nuestros hermanos y hermanas están viviendo en Tierra Santa y Oriente Medio.


3. San Juan Pablo II realizaba el Viacrucis todos los días

El Viacrucis tenía un lugar especial en el corazón de San Juan Pablo II. Él creció cerca de un antiguo santuario en la ciudad de “Kalwaria Zebrzydowska” El santuario se erigió en un paisaje de colinas y fue formado para parecerse al Viacrucis en Jerusalén. Existen numerosas capillas en las cuales los peregrinos pueden seguir la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Al visitar el sitio una vez convertido en Papa, Juan Pablo II dijo:

“Realmente no sé cómo agradecer a la Divina Providencia por haberme concedido volver a visitar este lugar: Kalwaria Zebrzydowska, el Santuario de la Madre de Dios, los lugares santos de Jerusalén conectados con la vida de Jesús y la de su Madre reproducidos aquí, los “pequeños caminos” como se les llama. Los visité a menudo en mi niñez y cuando era joven. Los visité como sacerdote. Especialmente, visitaba con regularidad  el Santuario de Kalwaria siendo arzobispo de Cracovia y cardenal”. (Apostolic Pilgrimage to Poland)

Hacer el Viacrucis en Kalwaria lo formó y como resultado rezaba sus estaciones a diario, sin importar nada más. Incluso él fue quien instaló un conjunto de estaciones en los apartamentos apostólicos.

4. Jesús solicitó en las revelaciones privadas dadas a Santa Faustina que se rezara diariamente el Viacrucis

Aún cuando Santa Faustina es conocida principalmente por haberle sido dada la Coronilla de la Divina Misericordia, Jesús también le pidió específicamente que realizara el Viacrucis diariamente a las 3:00 pm:

“Hija mía, haz todo lo posible para hacer el Viacrucis en esta hora, siempre que tus obligaciones lo permitan; y si no pudieras hacerlo,  al menos visita la capilla por un momento y adora, en el Santísimo Sacramento, Mi corazón, el cual está lleno de misericordia". (Diario, 1572, énfasis añadido)

Las estaciones del Viacrucis una gran devoción que nos une al sufrimiento y muerte de Cristo y nos permite la oportunidad de acompañarlo en la Vía Dolorosa. Vemos como Él sufre bajo el peso de la cruz y nos damos cuenta que son nuestros pecados los que lo crucificaron.

El Viacrucis no ha sido pensado sólo para orar durante la Cuaresma, sino que puede realizarse devotamente durante todos los días del año.

miércoles, 25 de febrero de 2015

TODO SOBRE EL VÍA CRUCIS - EXPLICACIÓN, ORACIONES Y ESTACIONES.


EL VIA CRUCIS
¿Qué es el viacrucis?

Es la meditación de los momentos y sufrimientos vividos por Jesús desde que fue hecho prisionero hasta su muerte en la cruz y posterior resurrección. Literalmente, vía crucis significa "camino de la cruz". Al rezarlo, recordamos con amor y agradecimiento lo mucho que Jesús sufrió por salvarnos del pecado durante su pasión y muerte. Dicho camino se representa mediante 15 imágenes de la Pasión que se llaman "estaciones". Te animarás a cargar con las cruces de cada día, si recuerdas con frecuencia las estaciones o pasos de Jesús hasta el Calvario.


¿Cuáles son las promesas de 
Jesucristo a los devotos del via crucis?

A la edad de 18 años, Estanislao, joven español, ingresó al noviciado de los “Hermanos de las escuelas cristianas" , en Bugedo (Burgos, España). En la vida religiosa, este joven tomó los votos de religión que son: el cumplimiento de los reglamentos, avanzar en la perfección cristiana; y alcanzar el amor puro. En el mes de octubre de 1926, este hermano se ofreció a Jesús por medio de María Santísima. Poco después de haber hecho esta donación heroica de sí mismo, el joven religioso enfermó y meses después, murió. Fue en marzo de 1927. 

Según el maestro de novicios, Estanislao era un alma escogida de Dios que recibía mensajes del cielo. Sus confesores y teólogos reconocieron estos hechos sobrenaturales como actos insignes. Su director espiritual le había ordenado escribir todas las promesas transmitidas por Nuestro Señor, entre otras las relacionadas con los devotos del via crucis.


Promesas para los devotos del Via Crucis 

1.- Yo concederé todo cuanto se me pidiere con fe, durante el rezo del Via Crucis.

2.- Yo prometo la vida eterna a los que, de vez en cuando, se aplican a rezar el Via Crucis.

3.- Durante la vida, yo les acompañaré en todo lugar y tendrán Mi ayuda especial en la hora de la muerte.

4.- Aunque tengan más pecados que las hojas de las hierbas que crece en los campos, y más que los granos de arena en el mar, todos serán borrados por medio de esta devoción al Via Crucis. (Nota: Esta devoción no elimina la obligación de confesar los pecados mortales. Se debe confesar antes de recibir la Santa Comunión.)

5.- Los que acostumbran rezar el via crucis frecuentemente, gozarán de una gloria extraordinaria en el cielo.

6.- Después de la muerte, si estos devotos llegasen al purgatorio, Yo los libraré de ese lugar de expiación, el primer martes o viernes después de morir. 

7.- Yo bendeciré a estas almas cada vez que rezan el Via Crucis; y mi bendición les acompañará en  todas partes de la tierra. Después de la muerte, gozarán de esta bendición en el Cielo, por toda la eternidad.

8.- A la hora de la muerte, no permitiré que sean sujetos a la tentación del demonio. Al espíritu maligno le despojaré de todo poder sobre estas almas. Así podrán reposar tranquilamente en mis brazos.

9.- Si rezan con verdadero amor, serán altamente premiados. Es decir, convertiré a cada una de estas almas en Copón viviente, donde me complaceré en derramar mi gracia.

10.- Fijaré la mirada de mis ojos sobre aquellas almas que rezan el via crucis con frecuencia y Mis Manos estarán siempre abiertas para protegerlas.

11.- Así como yo fui clavado en la cruz, igualmente estaré siempre muy unido a los que me honran, con el rezo frecuente del via crucis.

12.- Los devotos del via Crucis nunca se separarán de mí porque Yo les daré la gracia de jamás cometer un pecado mortal.

13.- En la hora de la muerte, Yo les consolaré con mi presencia, e iremos juntos al cielo. La muerte será dulce para todos los que Me han honrado durante la vida con el rezo del via Crucis.

14.- Para estos devotos del viacrucis, Mi alma será un escudo de protección que siempre les prestará auxilio cuando recurran a Mí..




¿Cómo se reza el Via Crucis?


ORACIONES INICIALES

Alma de Cristo, santifícame. Cuerpo de Cristo, sálvame. Sangre de Cristo, embriágame. Agua del costado de Cristo, lávame. Pasión de Cristo, confórtame. Oh buen Jesús, óyeme. Dentro de tus llagas, escóndeme. No permitas que me aparte de Ti. Del maligno enemigo, defiéndeme. En la hora de mi muerte, llámame y mándame ir a Ti, para que con tus santos te alabe, por los siglos de los siglos. Amén.

Por la señal, de la Santa Cruz de nuestros enemigos líbranos, Señor, Dios nuestro.

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.


ACTO DE CONTRICCIÓN

Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre y redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme, y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amén.



1ª ESTACIÓN: JESÚS SENTENCIADO A MUERTE 

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Sentenciado y no por un tribunal, sino por todos. Condenado por los mismos que le habían aclamado poco antes. Y El calla...

Nosotros huimos de ser reprochados. Y saltamos inmediatamente...
Dame, Señor, imitarte, uniéndome a Ti por el Silencio cuando alguien me haga sufrir. Yo lo merezco. ¡Ayúdame!

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro




2ª ESTACIÓN: JESÚS CARGADO CON LA CRUZ

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Que yo comprenda, Señor, el valor de la cruz, de mis pequeñas cruces de cada día, de mis achaques, de mis dolencias, de mi soledad.
Dame convertir en ofrenda amorosa, en reparación por mi vida y en apostolado por mis hermanos, mi cruz de cada día.

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



3ª ESTACIÓN: JESÚS CAE, POR PRIMERA VEZ, BAJO EL PESO DE LA CRUZ

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Tú caes, Señor, para redimirme. Para ayudarme a levantarme en mis caídas diarias, cuando después de haberme propuesto ser fiel, vuelvo a reincidir en mis defectos cotidianos.
¡Ayúdame a levantarme siempre y a seguir mi camino hacia Ti!

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



4ª ESTACIÓN: ENCUENTRO CON LA VIRGEN

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Haz Señor, que me encuentre al lado de tu Madre en todos los momentos de mi vida. Con ella, apoyándome en su cariño maternal, tengo la seguridad de llegar a Ti en el último día de mi existencia.
¡Ayúdame Madre!

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



5ª ESTACIÓN: EL CIRINEO AYUDA AL SEÑOR A LLEVAR LA CRUZ

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Cada uno de nosotros tenemos nuestra vocación, hemos venido al mundo para algo concreto, para realizarnos de una manera particular. ¿Cuál es la mía y cómo la llevo a cabo?
Pero hay algo, Señor, que es misión mía y de todos: la de ser Cirineo de los demás, la de ayudar a todos.
¿Cómo llevo adelante la realización de mi misión de Cirineo?

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



6ª ESTACIÓN: LA VERÓNICA ENJUGA EL ROSTRO DE JESÚS

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Es la mujer valiente, decidida, que se acerca a Ti cuando todos te abandonan. Yo, Señor, te abandono cuando me dejo llevar por el "qué dirán", del respeto humano, cuando no me atrevo a defender al prójimo ausente, cuando no me atrevo a replicar una broma que ridiculiza a los que tratan de acercarse a Ti. Y en tantas otras ocasiones.

Ayúdame a no dejarme llevar por el respeto humano, por el "qué dirán".
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



7ª ESTACIÓN: SEGUNDA CAÍDA EN EL CAMINO DE LA CRUZ

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Caes, Señor, por segunda vez. El Via Crucis nos señala tres caídas en tu caminar hacia el Calvario. Tal vez fueran más.
Caes delante de todos... ¿Cuándo aprenderé yo a no temer el quedar mal ante los demás, por un error, por una equivocación?. ¿Cuándo aprenderé que también eso se puede convertir en ofrenda?

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



8ª ESTACIÓN: JESÚS CONSUELA A LAS HIJAS DE JERUSALÉN

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Muchas veces, tendría yo que analizar la causa de mis lágrimas. Al menos, de mis pesares, de mis preocupaciones. Tal vez hay en ellos un fondo de orgullo, de amor propio mal entendido, de egoísmo, de envidia.
Debería llorar por mi falta de correspondencia a tus innumerables beneficios de cada día, que me manifiestan, Señor, cuánto me quieres.
Dame profunda gratitud y correspondencia a tu misericordia.

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



9ª ESTACIÓN: JESÚS CAE POR TERCERA VEZ

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Tercera caída. Más cerca de la Cruz. Más agotado, más falto de fuerzas. Caes desfallecido, Señor.
Yo digo que me pesan los años, que no soy el de antes, que me siento incapaz.
Dame, Señor, imitarte en esta tercera caída y haz que mi desfallecimiento sea beneficioso para otros, porque te lo doy a Ti para ellos. 

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



10ª ESTACIÓN: JESÚS DESPOJADO DE SUS VESTIDURAS

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Arrancan tus vestiduras, adheridas a Ti por la sangre de tus heridas.
A infinita distancia de tu dolor, yo he sentido, a veces, cómo algo se arrancaba dolorosamente de mí por la pérdida de mis seres queridos. Que yo sepa ofrecerte el recuerdo de las separaciones que me desgarraron, uniéndome a tu pasión y esforzándome en consolar a los que sufren, huyendo de mi propio egoísmo.

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



11ª ESTACIÓN: JESÚS CLAVADO EN LA CRUZ

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Señor, que yo disminuya mis limitaciones con mi esfuerzo y así pueda ayudar a mis hermanos. Y que cuando mi esfuerzo no consiga disminuirlas, me esfuerce en ofrecértelas también por ellos.

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro.



12ª ESTACIÓN: JESÚS MUERE EN LA CRUZ

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Te adoro, mi Señor, muerto en la Cruz por Salvarme. Te adoro y beso tus llagas, las heridas de los clavos, la lanzada del costado... ¡Gracias, Señor, gracias!
Has muerto por salvarme, por salvarnos. Dame responder a tu amor con amor, cumplir tu Voluntad, trabajar por mi salvación, ayudado de tu gracia. Y dame trabajar con ahínco por la salvación de mis hermanos.

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



13ª ESTACIÓN: JESÚS EN BRAZOS DE SU MADRE

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Déjame estar a tu lado, Madre, especialmente en estos momentos de tu dolor incomparable. Déjame estar a tu lado. Más te pido: que hoy y siempre me tengas cerca de Ti y te compadezcas de mí.
¡Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía!

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



14ª ESTACIÓN: EL CADÁVER DE JESÚS PUESTO EN EL SEPULCRO

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

Todo ha terminado. Pero no: después de la muerte, la Resurrección. Enséñame a ver lo transitorio y pasajero, a la luz de lo que perdura. Y que esa luz ilumine todos mis actos. Así sea.

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro

  

15ª ESTACIÓN: JESÚS RESUCITA

Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.

«¿Por qué buscáis entre los muertos al que está vivo? No está aquí, ha resucitado» (Lc 24,5-6).

Unas piadosas mujeres fueron al sepulcro de Jesús muy temprano.  El anuncio de la resurrección convierte su tristeza en alegría. Jesús está vivo y nosotros vivimos en Él para siempre. La resurrección de Cristo inaugura para la humanidad una renovada primavera de esperanza.

Jesús, enséñame a mantener siempre la esperanza.

Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.

Se reza a continuación un Padrenuestro



ORACIÓN FINAL

Te suplico, Señor, que me concedas, por intercesión de tu Madre la Virgen, que cada vez que medite tu Pasión, quede grabado en mí con marca de actualidad constante, lo que Tú has hecho por mí y tus constantes beneficios. Haz, Señor, que me acompañe, durante toda mi vida, un agradecimiento inmenso a tu Bondad. Amén.

Virgen Santísima de los Dolores, mírame cargando la cruz de mi sufrimiento; acompáñame como acompañaste a tu Hijo Jesús en el camino del Calvario; eres mi Madre y te necesito. Ayúdame a sufrir con amor y esperanza para que mi dolor sea dolor redentor que en las manos de Dios se convierta en un gran bien para la salvación de las almas. Amén.

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