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miércoles, 23 de noviembre de 2016

LA ALEGRÍA DE DAR


La alegría de dar



Cada día podemos ser generosos en dar algo a los demás. Con la  práctica se va abriendo el corazón poco a poco, y descubrimos, con admiración, que nunca hay pérdida. En cambio nos fortalecemos y podemos superar el temor de ser vulnerables. Practicar la generosidad ejercita al corazón: cuanto más se da, más se fortalece. He aquí una parábola que lo ilustra.

Un anciano muy avaro, en su lecho de muerte, ordenó a la sirvienta que colocara en su féretro una bolsa repleta de monedas de oro. Cuando su alma llegó al más allá, se vio de repente ante una mesa con platos deliciosos. —Dígame, ¿cuánto valen estos platos: el pan con salmón, las sardinas y las empanadas?, preguntó mientras se le hacía agua la boca. —Todo vale diez pesos, le respondió: —¡Qué barato! Y llenó toda una bandeja con el exquisito menú. Cuando fue a pagar con una moneda de oro, el vendedor apenado hizo una señal negativa con la cabeza y dijo: —Quizá hayas aprendido muchas cosas en la vida, pero lo que no sabes es que aquí sólo aceptamos el dinero que has regalado.  

El egoísmo atrofia al hombre, que sólo en la donación generosa a los demás, encuentra su madurez y plenitud. Si te preocupas demasiado por ti mismo y tu propio entorno, si vives para acumular dinero y comodidades, no te quedará tiempo para los demás. Si no vives para los demás, la vida carecerá de sentido para ti, porque la vida sin amor no vale nada. P. Natalio.


* Enviado por el P. Natalio 

EL EVANGELIO DE HOY MIÉRCOLES 23 DE NOVIEMBRE DEL 2016


No me dejes olvidar…
Lucas 21, 12-19. Miércoles XXXIV. Tiempo ordinario. Ciclo C. Persecución de los discípulos


Por: H. Adrián Olvera de la Cruz LC | Fuente: www.missionkits.org 



En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Cristo, Rey nuestro. ¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Señor Jesús, simplemente quiero estar un tiempo contigo, pues me ha llegado la pregunta de cómo sería mi vida si sólo viviera en tu presencia.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)


Del santo Evangelio según san Lucas 21, 12-19
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Los perseguirán y los apresarán, los llevarán a los tribunales y a la cárcel, y los harán comparecer ante reyes y gobernadores, por causa mía. Con esto ustedes darán testimonio de mí.
Grábense bien que no tienen que preparar de antemano su defensa, porque yo les daré palabras sabias, a las que no podrá resistir ni contradecir ningún adversario de ustedes.
Los traicionarán hasta sus propios padres, hermanos, parientes y amigos. Matarán a algunos de ustedes, y todos los odiarán por causa mía. Sin embargo, ni un cabello de su cabeza perecerá. Si se mantienen firmes, conseguirán la vida". 
Palabra del Señor
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio.
El simple hecho de ir caminando por la senda de la vida nos va mostrando la fugacidad de las cosas. Los momentos que más hemos esperado y, también los que más hemos temido, se vuelven fieles compañeros del tiempo que pasa y no vuelve. Los brindis y abrazos quedan sólo en fotos plasmados; los llantos y la misma muerte se convierten en moralejas o en recuerdos muy presentes. La fidelidad encuentra su sentido en la traición y la vida en la persecución.
Señor, a pesar de llevarme por caminos donde no hay más que flores, montañas y horizontes, también he recorrido caminos en donde sólo hay oscuridad y el cansancio me ha propuesto ya no caminar más. Ayúdame a no detenerme y nunca olvidar que, aunque es verdad que todo cambia, todo pasa… tanto el bien como el mal… Sólo Tú permaneces, sólo Tú estás.
Me has hecho valorar las más grandes alegrías y también me has ayudado a vivir aquello que pensé nunca soportar. Ahí has estado y te repito, Señor, no me hagas olvidar que has cumplido tus promesas. No permitas que olvide que estoy bajo tu cuidado, bajo tu defensa.
Las copas se podrán romper, los abrazos se podrán olvidar, las lágrimas tienden siempre a secar, pero sé que en mi vida tu amor por mí nunca terminará. No me dejes olvidar…
«El poder del amor que no retrocede ante nada, ni frente al cielo en convulsión, ni frente a la tierra en llamas, ni frente al mar embravecido. Dios es más fuerte que cualquier otra cosa. Esta convicción da al creyente serenidad, valor y fuerza para perseverar en el bien frente a las peores adversidades. Incluso cuando se desatan las fuerzas del mal, los cristianos han de responder al llamado de frente, listos para aguantar en esta batalla en la que Dios tendrá la última palabra. Y será una palabra de amor.»
(Homilía de S.S. Francisco, 29 de noviembre de 2015).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Invitaré a un pequeño grupo de amistades a una hora eucarística, mañana jueves, para preparar nuestro corazón para el inicio del nuevo año litúrgico.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.

ESTRÉS ORIGEN Y PREVENCIÓN


Estrés origen y prevención



El estrés es una reacción fisiológica que eleva nuestros niveles de adrenalina, con el objetivo de estar alerta ante algún suceso que percibamos como amenazante para nuestro organismo. El exceso de estas reacciones genera síntomas tales como dolor de cabeza, náuseas, alteración del apetito, diarrea, gastritis, insomnio, palpitaciones, temblores, dolor en la espalda, ansiedad, temores, etc., y consecuencias patológicas que van desde trastornos gástricos e intestinales a hipertensión arterial, con mayor riesgo de eventos cardiovasculares o cerebrovasculares.

Todos estos problemas me dificultan el llevar una vida normal y relajada. Desde este mismo instante me propongo cambiar mi postura y comienzo a pensar en positivo. Voy a tener presente en cada instante de mi vida la frase: “Si el problema tiene solución ¿para qué preocuparme? y si no lo tiene ¿para qué preocuparme?”

Hay decenas de causas que pueden provocarlo, entre las cuales podemos mencionar algunas que son propias de la vida moderna y agitada que llevamos: el exceso o falta de trabajo, los problemas de relación con mi pareja, con mis familiares, con las personas con las que me encuentro cada día; las malas noticias de la prensa; etc.

La prevención del estrés está orientada a personas que en mayor o menor medida padecen de forma crónica estos síntomas y no pueden controlar su nivel de estrés ni las situaciones que lo ocasionan. Pienso en positivo; estoy pendiente de la conciencia del alma más que de la conciencia de mi cuerpo y de mi mente. No me engancho a los pensamientos negativos; cuando aparecen en mi mente, me esfuerzo para no colgarme de ellos, simplemente les veo pasar, pues esos pensamientos no me proporcionan felicidad, solo malestar y recreándome en ellos añado un problema más a mi vida.....

Si los exámenes, el trabajo, las presiones del día a día te tienen a mal traer, practica estos consejos para deshacerte de la tensión:

- Mueve el cuerpo: camina, salta a una soga, baila.
- Entrégate a una relajante y merecida sesión de masajes.
- Estira las piernas, brazos, cuerpo, elonga. El cuerpo se relaja... la mente se relaja.
- Respira profundo, varias veces, tratando de llevar el aire a la base de los pulmones. Exhala despacio.
- Hazte masajes en los pies, o mejor aún, remójalos antes en una deliciosa agua tibia.
- Practica algún deporte, como la natación o el tenis.
- Hazte unos minutos para ti. Asiste a algún taller literario, o grupo de charla. Lee un buen libro que te agrade.
- Duerme una media hora más por día.
- Teje, aunque no tengas planes de hacer algo determinado. Las bufandas siempre son prácticas, y se tejen fácilmente.
- Alquila una película de comedia y ríete a carcajadas.
- Haz tareas manuales placenteras, como la jardinería, una escultura en arcilla, o pintura.
- En fin, vive de manera pausada, tratando de disfrutar al máximo cada minuto que pasa

El estrés y la ansiedad son tan frecuentes en nuestra vida cotidiana que es necesario tomar cartas en el asunto. La buena noticia es que superar el estrés es más sencillo de lo que piensas. La Asociación Americana Para La Ansiedad y La Depresión (ADAA) ha presentado una lista de los recursos necesarios para hacer la que la ansiedad y la depresión tengan niveles tolerables. Te presentamos algunos de estos consejos.  

• Tiempo de espera: Cuando se está pasando por un proceso de ansiedad o depresión lo necesario es tomarse las cosas con más calma y dar un paso hacia adelante. Prueba a practicar yoga, escuchar música o recibir un masaje. La meditación también relajará su mente y hará que vea los problemas con más distancia. 

• Evita el alcohol y la cafeína: Aunque pueda parecer una solución rápida, en realidad el café puede agravar tus niveles de ansiedad o estrés e incluso provocar ataques de pánico. Esto no significa que tienes que reducir su ingesta por completo tan solo moderarla. Por ejemplo no tomar más de dos tazas de café al día. 

• Duerme más: La falta de sueño puede afectar negativamente a nuestra salud pero cuando estamos estresados debemos prestar mucha más atención en dormir 8 horas. Intenta siempre acostarte antes de las 12 para aumentar tu calidad de sueño. 

• Respira profundamente: Evita las situaciones de pánico centrándote en la respiración. Toma respiraciones profundas: Inspira y expira de manera lenta.

• Come de manera equilibrada: Cuando estamos pasando por un periodo de estrés es muy tentador recurrir a comida preparada por falta de tiempo para preparar buenas comidas. Sin embargo, la comida es importante para combatir el estrés de manea que es necesario encontrar tiempo. Come verduras y frutas. La falta de nutrientes esenciales puede agravar tu ansiedad. 

• Dedica tiempo para hacer ejercicio: Mantener tu cuerpo activo te hará sentir bien y te ayudará a mejorar tu salud en general. Consulta en la parte inferior del artículo más consejos sobre fitness. 

• Cuenta hasta 10: Al igual que respirar profundamente, contar hasta 10 o incluso 20 puede ser un alivio instantáneo. Suena un poco infantil pero sencillamente el hecho de contar te permitirá centrarte en tu respiración y mejorar tus niveles de ansiedad de manera gradual.

• Perspectiva: Acepta que no eres Dios y que no lo puedes controlar todo. Es importante poner el estrés en perspectiva. Piensa en ocasiones anteriores cuando sentías estrés y cómo fuiste capaz de superarlo.

• La risa es la mejor medicina: Otra manera de poner tu ansiedad en perspectiva es con una buena dosis de risa. Da la bienvenida al humor en su vida en cualquiera de sus formas (Películas, teatro, actuaciones).

• Actitud positiva: Cuando nos enfrentamos al estrés o la ansiedad es vital para mantener una actitud positiva. No todo el mundo es optimista por naturaleza, pero la elección de centrarse en lo positivo puede ayudar a sustituir los pensamientos negativos. 

• Involúcrate: Colaborar en actividades solidarias le permite a tu estrés tomarse un descanso dentro la rutina diaria además de ofrecer tu ayuda por una buena causa. 

• Conocer la causa: Tomar conciencia de los factores desencadenantes de la ansiedad puede realmente ayudar a determinar la mejor manera de combatirlos. Puede que sea el trabajo, la familia, un lugar o una persona. Escribe notas cuando te sientas estresado y comprueba si es una situación que puede ser evitada.   

• Comparte tus sentimientos: Cuando la ansiedad alcanza grados altos es muy difícil combatirla en soledad. Habla con amigos de tu problema. Los familiares y conocidos te darán una perspectiva diferente de tu problema. Acude a un profesional si es necesario. 

• Controlar el estrés con ejercicio físico 30 minutos al día: Dedicar 30 minutos de ejercicio al día no le robará grandes cantidades de tiempo. Puede probar cosas diversas como caminar, nadar, bailar, ir en bicicleta y correr. 

• Encuentra la diversión: La mejor manera de estar motivado a la hora de hacer ejercicio es descubrir lo que te gusta. Algunas personas disfrutan practicando ejercicio en solitario mientras que otras prefieren actividades en grupo. En este caso Yoga en una buena opción. 

• Establecer metas diarias: Establecer una meta diaria es otra manera de animarse a sí mismo para seguir adelante. Es preferible un ejercicio constante aunque breve. Es decir, es mejor caminar todos los días media hora en lugar de caminar durante horas el fin de semana. 

• Paciencia: Es importante ser tolerante y paciente cuando se está iniciando un nuevo ejercicio. Si has llevado hasta ahora una vida sedentaria tardarás entre cuatro y ocho semanas antes de ponerte en forma y notar los cambios en tu cuerpo.

5 CONSEJOS PRÁCTICOS PARA CRECER EN FAMILIA DURANTE EL ADVIENTO


5 consejos prácticos para crecer en familia durante Adviento
El Adviento está lleno de hermosas y antiguas tradiciones únicas del cristianismo


Por: n/a | Fuente: National Catholic Rebister // ACI Prensa 




El Adviento está lleno de hermosas y antiguas tradiciones únicas del cristianismo que los padres pueden compartir con sus hijos durante el tiempo de preparación para celebrar la Navidad.

Aquí 5 consejos prácticos para crecer en familia durante el Adviento compartidos por el National Catholic Register.

1. Colocar una corona de Adviento sobre la mesa y encenderla antes de cenar

No debe permitirse que esta tradición milenaria se guarde solo para el día domingo en la iglesia, sino que también pueda encenderse por las noches a la hora de la cena.

La corona simboliza más que las cuatro semanas de Adviento; pues también pueden representar los 4.000 años que el hombre estuvo en la tierra antes de que naciera el Salvador. Por otro lado, los niños pueden turnarse iluminando y soplando las velas.



Usualmente se puede recitar una oración diciendo antes la siguiente jaculatoria: "Ven, Señor Jesús, nace en nuestros corazones".

2. Hacer obras de misericordia

El Adviento es un tiempo de preparación, y todas las personas necesitan formas tangibles de prepararse espiritualmente para el nacimiento de Jesús.

Se puede armar un pequeño pesebre en algún lugar de su casa, y cada vez que algún miembro de la familia realice una obra de misericordia, puede poner un hilo de heno en el pesebre.

Es una bendición ver cada día más lleno el pesebre para Jesús cuando se acerca el día de su natividad. Recuerde no colocar la imagen del Niño Jesús hasta la víspera de Navidad.

3. No olvidar al verdadero San Nicolás

Según varios historiadores, el popular Santa Claus es la distorsión –primero literaria y luego comercial– de San Nicolás, el generoso Obispo de Myra, patrono de los niños, navegantes y cautivos.

La leyenda de Santa Claus deriva directamente de la figura de San Nicolás, quien según la tradición, entregó todos sus bienes a los pobres para hacerse monje y obispo, distinguiéndose siempre por su generosidad hacia los niños.

Por haber sido tan amigo de la niñez, en su día se reparten dulces y regalos. Es representado como un anciano vestido de rojo, con una barba muy blanca, que pasa de casa en casa repartiendo regalos y dulces a los niños.

4. Enseñar a los niños

Anime a los niños en este tiempo de preparación para la Navidad a orar por los demás, ayudar en casa, compartir los bienes con quien más necesite, cumplir las tareas sin quejarse, hacer un sacrificio, leer algún pasaje de la Biblia, dar gracias a Dios, saludar cariñosamente, no pelear con sus hermanos, etc.

Es importante no solo que los niños se comprometan a realizar buenas acciones para el nuevo año que se aproxima, sino también que los padres enseñen a sus hijos el verdadero sentido del Adviento.

Es decir, que mediten sobre la venida final del Señor, así como del nacimiento de Jesús y su irrupción en la historia del hombre en Navidad. Además, mostrarles el significado de las coronas de Adviento, las velas y el color morado para la liturgia que significa preparación espiritual y penitencia.

5. Crecer espiritualmente

¿Puede añadir a su día un tiempo de oración corto, la lectura de la Biblia cada mañana durante el Adviento o quizás un Rosario diario? Cualquiera podría convertirse en un gran hábito.

Puede servirle cualquier actividad que desarrolle su parroquia también. Finalmente, debe orar para que la Navidad le traiga un nuevo celo y un amor más profundo por Cristo este año.

Publicado originalmente, en inglés, en National Catholic Rebister
Traducido al castellano por ACI Prensa

CÓMO ORAR CUANDO SIENTES MIEDO?


¿Cómo orar cuando sientes miedo?
Cuando un hijo se dirige a su padre con humildad y absoluta confianza, lo obtiene todo de él.


Por: P Evaristo Sada LC | Fuente: www.la-oracion.com 




Todos queremos seguridad y buscamos seguridades. Nos da miedo cuando no hay seguridad, cuando perdemos nuestras seguridades o cuando se ven amenazadas o reducidas.

Te da seguridad un buen empleo, la aceptación de los demás, las cosas que posees, los amigos que te respaldan, un entorno conocido, tus habilidades, tu formación profesional, tus títulos, el dinero, recibir reconocimientos y dignidades, ser consultado, recibir atenciones, tu hogar, una buena salud, etc.

Cuando se ponen en riesgo nuestras seguridades nos entra miedo. Se derrumban o disminuyen nuestras seguridades y corremos el riesgo de desmoronarnos. Cuando esto sucede nos encontramos en la posición del pobre, del que nunca ha tenido nada o del que lo ha perdido todo y depende totalmente de la gratuidad del amor de Dios.

Es humano tener miedo. No nos extraña que hasta los Papas sientan miedo cuando son elegidos. Tengo a la mano una oración del Cardenal Eduardo Pironio, argentino, en que se presenta ante Dios con mucho miedo. Tuve la gracia de tratar mucho con él y hablaba con frecuencia de la confianza, de la virtud de la esperanza; tal vez por el miedo que sentía. Extraigo partes de una de sus oraciones:

Señor,
Hoy necesito hablar contigo con sencillez de pobre, con corazón quebrantado pero enteramente fiel.

Sufro, Señor, porque tengo miedo,
mucho miedo, más que nunca.
Yo no sé por qué, o mejor, sí se por qué:
porque Tú, Señor, adorablemente lo quieres.
Y yo lo acepto.
Pero también escucho tu voz de amigo:
"No tengas miedo, no se turbe tu corazón.
Soy yo. Yo estaré contigo hasta el final."
Repítemelo siempre Señor,
y en los momentos más difíciles,
suscita a mi alrededor almas muy simples
que me lo digan en tu nombre.

Tengo miedo, Señor, mucho miedo.
Miedo de no comprender a mis hermanos
y decirles las palabras que necesitan.
Miedo de no saber dialogar,
de no saber elegir bien a mis colaboradores,
de no saber organizar la diócesis,
de no saber planear,
de dejarme presionar por un grupo o por el otro,
de no ser suficientemente firme
como corresponde a un Buen Pastor,
de no saber corregir a tiempo,
de no saber sufrir en silencio,
de preocuparme excesivamente por las cosas al modo humano,
y entonces, estoy seguro de que me irá mal.
Por eso, Señor, te pido que me ayudes.

Me hace bien sentirme pobre,
muy pobre, muy inútil y pecador.
Ahora siento profundamente mis pecados.
He pecado mucho en mi vida
y tú me sigues buscando y amando.
Pero te repito, sigo teniendo miedo, mucho miedo.
No lo tendría si fuera más humilde.
Yo creo que me asusta la posibilidad del fracaso.
Temo fracasar, sobre todo, después de que me esperaron tanto.
Pero no pienso que Tú también fracasaste,
que no todos aceptaron tu enseñanza.
Hubo muchos que te dejaron porque "les resultaba dura" y absurda tu doctrina.

Nunca te fue bien, Señor:
te criticaron siempre y quisieron despeñarte.
Si no te mataron antes fue por miedo al pueblo que te seguía.
Pero te rechazaron los sacerdotes; te traicionó Judas; te negó Pedro;
te abandonaron todos tus discípulos
¿y no sufrías entonces?
Y yo, ¿quiero ser más que el Maestro y tener más fortuna que mi Señor?
Jesús, enséñame a decir que sí y a no dejarme aplastar por el miedo.

El Cardenal Pironio sabía ver en el sufrimiento la mano providente de Dios Padre. En su testamento espiritual escribe: Que nadie se sienta culpable de haberme hecho sufrir, porque han sido instrumento providencial de un Padre que me amó mucho.

Lo que más aprendo de esta oración es la humildad y la confianza con que se dirige a Dios. Cuando un hijo se dirige a su padre con humildad y absoluta confianza, lo obtiene todo de él. El padre es protector y proveedor. Si el hijo expone a su padre su debilidad, su miseria, sus faltas, su condición vulnerable, y se dirige a él pidiendo ayuda con absoluta confianza, un buen padre siempre responde.

Cuando sentimos miedo al perder nuestras seguridades o al no tener seguridad alguna, podemos tener la certeza de que si lo aceptamos con humildad y acudimos con confianza a Dios Padre, el amor de Dios vendrá en nuestro auxilio. La confianza filial lo obtiene todo de Dios.

Cuando sentimos miedo también podemos orar con la ayuda del Salmo 23: Aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque Tú vas conmigo. Tu vara y tu cayado me sosiegan y del Salmo 30 En ti, Señor, me cobijo, nunca quede defraudado. Sé mi roca de refugio, alcázar donde me salve; pues tú eres mi peña y mi alcázar.

Cuando sentimos miedo, la roca firme del amor misericordioso de Dios es nuestra seguridad.

PAPA FRANCISCO DA ESTOS CONSEJOS A QUIENES DUDAN DE SU FE


Papa Francisco da estos consejos a quienes tienen dudas de fe
Por Álvaro de Juana
 Foto: Lucía Ballester / ACI Prensa




VATICANO, 23 Nov. 16 / 05:40 am (ACI).- La primera Audiencia General después de concluir el Jubileo de la Misericordia tuvo lugar en el Aula Pablo VI del Vaticano con miles de fieles que escucharon al Papa Francisco hablar de dos obras de misericordia: aconsejar a los que dudan y enseñar a los ignorantes.

En la catequesis, el Papa habló también de las dudas de fe y explicó que estas “tocan la fe, en sentido positivo, son un signo de que queremos conocer mejor y más a fondo a Dios, a Jesús y al misterio de su amor hacia nosotros”.

“Es un bien que nos preguntemos sobre nuestra fe, porque de este modo somos empujados a profundizar en ella”, destacó. No obstante, “las dudas, de todas maneras, son superadas”. Para ello “es necesario escuchar la Palabra de Dios y comprender todo lo que nos enseña”.

El Papa explicó que una ayuda importante a este respecto es la catequesis con la que “el anuncio de la fe viene a encontrarnos en lo concreto de la vida persona y comunitaria”. El otro camino es el de “vivir lo más posible la fe”. “No hagamos de la fe una teoría abstracta donde las dudas se multiplican” sino “hagamos sobre todo de la fe nuestra vida”, exhortó el Pontífice.

“Busquemos practicarla en el servicio a los hermanos, especialmente a los más necesitados” y entonces “muchas dudas se desvanecerán porque sentimos la presencia de Dios y la verdad del Evangelio en el amor que, sin nuestro mérito, habita en nosotros y compartimos con los otros”, pidió a los miles de fieles que lo escuchaban.


Sobre las obras de misericordia de educar y aconsejar, el Obispo de Roma apuntó que “se pueden vivir tanto desde una dimensión sencilla, familiar, al alcance de todos como desde una dimensión institucional, organizada”.

El Papa pidió pensar en “cuántos niños sufren todavía de analfabetismo, de falta de instrucción”. “Es una condición de gran injusticia que afecta a la dignidad misma de la persona”, añadió.

“Sin educación, después se convierte fácilmente en presa de la explotación y de varias formas de malestar social”, manifestó en la catequesis.

El Santo Padre recordó también que la Iglesia a lo largo de los siglos ha sido protagonista de la educación “porque su misión de evangelizar comporta el compromiso de restituir la dignidad a los más pobres”.

“Del primer ejemplo de una ‘escuela’ fundada por San Justino que está aquí en Roma, en el segundo siglo, para que los cristianos conocieran mejor la Sagrada Escritura, hasta San José de Calasanz, que abrió las primeras escuelas populares gratuitas de Europa, tenemos una larga lista de santos y santas que en varias épocas han llevado educación a los más desfavorecidos, sabiendo que a través de este camino podían superar la miseria y las discriminaciones”.

Francisco señaló entonces que estos santos comprendieron el significado de esta obra de misericordia y “a través de un trabajo sencillo y pocas estructuras han sabido restituir la dignidad a muchas personas”.


“La educación que daban a menudo estaba orientada también al trabajo”, y de ese modo "han surgido muchas y diversas escuelas profesionales, que habilitaban para el trabajo mientras educaban en los valores humanos y cristianos”.

“La educación, por tanto, es de verdad una peculiar forma de evangelización”, subrayó, y agregó luego: “cuánto más crece la educación, las personas adquieren más certeza y conciencia”.

El Papa también dijo que “expresar la misericordia hacia los dubitativos equivale a aliviar el dolor y el sufrimiento que proviene del miedo de la angustia que son consecuencia de la duda”.

“Es por tanto un acto de verdadero amor con el cual se tiene la intención de apoyar a una persona en la debilidad provocada por la incertidumbre”. 

LOS CINCO MINUTOS DE DIOS, 23 DE NOVIEMBRE


LOS CINCO MINUTOS DE DIOS
Noviembre 23



Cuando el terreno ya se halla preparado, se esparce la semilla, se entierra y se la deja pudrir en el seno de la madre tierra.
Alguno podría preguntar: ¿por qué no aprovechar ese grano en vez de hacerlo pudrir en la tierra?
Pero es que solamente así, pudriéndose, podrá germinar, fecundarse, multiplicarse, convertirse en nueva y mejor vida: la vida de la espiga, la plenitud de nuevos granos.
El dolor, lejos de destrozar al hombre, de destruirlo, puede purificarlo y disponerlo para una transformación. Lo que el hombre es y vale no se deprecia con el dolor, más bien se aquilata.
Precisamente los santos, esos crucifijos de carne, vieron a Dios y vivieron a Dios cuando sus ojos quedaron purificados por las lágrimas. Es que el dolor nos hace desprender de las escorias y purifica el oro de nuestro corazón.
La cruz no deforma, transforma; no oscurece, ilumina; no hace estoicos, talla santos. A condición de que se le dé su sentido redentor.
“La Iglesia rinde culto a los santos y venera sus imágenes y sus reliquias auténticas. Las fiestas de los santos proclaman las maravillas de Cristo en sus servidores y proponen ejemplos oportunos a la imitación de los fieles” (SC 11). Los santos se han hecho santos y no nacieron tales; tú no has nacido santo: puedes llegar a serlo.


* P. Alfonso Milagro

LOS CINCO MINUTOS DE DIOS, 22 DE NOVIEMBRE


LOS CINCO MINUTOS DE DIOS
Noviembre 22



¡El silencio!  Hoy nos cuesta bastante aceptar el silencio; estamos rodeados por todas partes de ruido ensordecedor. Ese ruido puede impedir que nos oigamos a nosotros mismos y que oigamos la voz de Dios que nos habla en nuestro interior.
¡Silencio! Cuesta a veces callar en los momentos difíciles, en las penas amargas y en los goces íntimos, en las calumnias mordaces y en las alabanzas excesivas, en los pareceres hirientes y en los vaivenes de un corazón que se aleja.
Silencios que traen como consecuencia la inmersión en el Dios que portamos en nuestra intimidad.
Si miramos el bosque, lo veremos lleno de vida; pero la flor que abre sus pétalos lo hace en silencio; la violeta que esparce su perfume, la enredadera que trepa a lo alto, la gramilla que alfombra, las ramas que se extienden, el agua que se desliza…  todo eso es silencio; y todo eso es vida y da la vida.
“Más vale escuchar el reproche de un sabio que oír el canto de los necios; porque como el crepitar de las espinas bajo la olla, así es la risa de los necios, y también esto es vanidad” (Ecl 7,5-6). Muchas veces será preferible el silencio a tu alrededor, que no vanas palabras; si las palabras son plata, el silencio es oro; en ese caso, el silencio muy fácilmente será cielo.


* P. Alfonso Milagro